Capitulo 11

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Aquella mañana parecía ser la más fría que hasta el momento ofrecía el año, Arabella se había despertado temprano, Tommy había abandonado la estancia hace una hora aproximadamente y la castaña había quedado despierta. Por eso es que había decidido aprovechar la mañana para organizar un poco su casa.

Estaba por llevar unas tazas de té que habían sido utilizadas la noche anterior. Fue entonces que se volteó encontrándose de cara con Polly, Arabella no pudo evitar dar un brinco al verla de pie con una cesta entre sus manos en el umbral de su sala de estar, dejó nuevamente las tazas en la mesa para llevar una mano a su pecho calmando ligeramente su impresión.

La mujer por su parte, lucía un rostro serio pero con sus ojos ligeramente más cálidos, sabía que Polly estaba molesta con Tommy, el mismo Shelby se lo había comentado la noche anterior, y si Arabella no confiara en la palabra del gánster probablemente también estaría igual de molesta que la mujer que estaba de pie frente a ella.

-Casi me matas de la impresión Poll- Su mano seguía en su pecho, mientras apoyaba la otra en su cadera- Tommy ya se fue por si lo estás buscando.

-No quiero ver a Thomas ahora- dejando la cesta sobre el suelo para luego dar unos cuantos pasos quedando frente a la castaña- Necesito tu ayuda Ara.

-Esta bien ¿qué sucede?.

Entonces Polly le comentó que Ada estaba encerrada nuevamente en aquel sótano, y que no quería recibir alguna visita e incluso las provisiones que le dejaba en ocasiones las encontraba intactas, un par de días habían transcurrido desde que el bebé de Ada había nacido, desde que Arabella golpeó a un policía y se la habían llevado a rastras con Freddie y también habían pasado un par de días desde que  Campbell se había aparecido frente a ella.

Fue así que dando unas rápidas zancadas se encontró tomando su abrigo y un paraguas, la lluvia caía en el exterior y por la intensidad de esta, se podía denotar que no se detendría, no al menos por ahora.

- ¿Crees que nos querrá ver ahora?

Le preguntó la castaña de ojos verdes volteando a ver a la mayor mientras niños tacones de ambas sonaban en el adoquín del camino.

- Espero que desee verte a ti, y que piense que tienes alguna información sobre Freddie.

-No lo vi en la estación Poll- Comenzó - Solo sé que estaba ahí, Tommy dijo que se encargaría.

-Y como siempre tú crees en Tommy.

La conversación acabó ahí entonces, porque a pesar de que la voz de Polly estaba cargada de enojo contra su sobrino, Arabella posiblemente creía que tenía la razón ¿Debería molestarse por eso? No lo creía así, después de todo el hombre siempre le había demostrado que podía creer en el, y el día que fue por ella a la comisaría le había dejado bastante en claro que aún la amaba, y eso era bastante razón para la joven el darle su voto de confianza.

Tras una caminata ya más silenciosa por parte de ambas, llegaron hasta el lugar de vivienda de Ada, Polly comenzó a llamar a la puerta no obteniendo respuesta desde adentro, Ada estaba molesta y ciertamente no la podían culpar de nada, creía sobre los hechos que había visto, los acontecimientos que se desarrollaron frente a sus ojos y en ellos solo podía culpar a su hermano.

-Ada, vamos amor abre la puerta.

Esta vez Arabella fue la que intentó hablarle a su amiga, pero al igual que Polly no consiguió respuesta alguna pero si ambas lograron escuchar el llanto del bebé.

-Piensa en el pequeño, Ada los bebés no tienen principios- Añadió Polly luego de llamar a la puerta una vez más.

Sin respuesta, eso es lo que obtuvieron nuevamente, Polly dejó la cesta en el suelo mientras tomaba la otra, le dio un ligero toque en el brazo a Arabella y fue así que ambas dejaron el lugar nuevamente, con la promesa de que volverían en un par de horas más.

The Devil's WeaknessWhere stories live. Discover now