The Devil's Weakness

Capitulo 18

Final de temporada.

Habían pasado 4 días desde que había descubierto cómo el hombre al que amaba había besado a una persona que no merecía el respeto ni el perdón de nadie, Arabella a lo largo de sus años lo que no eran demasiados como para hacerla experimentada, no se había sentido así de humillada en su vida,  quizás todo lo que había pensado o intuido en cuanto había visto a aquella camarera en el Garrison no era nada más que que presagios de un mal augurio.

En aquellos días no habían rastros de la chica fuerte que solía ser, le dolía el corazón y había estado ignorando o ahuyentando a cualquiera que se apellidase Shelby, al hermano del medio por sobre todo, la única que logró entrar en casa de la castaña fue Ada, la de ojos color zafiro maldecía hasta de lo más bajo a su hermano mayor y Arabella solo la escuchaba.

Quizás... muchas personas la tildarían de loca o de exagerada, después de todo solo había sido un beso, pero ¿cómo se supone que debes de sentirte cuando  miras a la persona que más amas besando a otra persona? Y que esa persona casi hace que les metan una bala en la cabeza.

-John y Tommy se pelearon- Le había comentado Ada- Tommy dejó que John le diera una paliza.

Arabella elevó su mirada hasta los ojos azules de su amiga mientras sostenía a Karl en sus brazos, el pequeño por muy extraño parecía calmarse con  el tacto de la castaña y a Arabella le ponía de buen humor pasar tiempo con ellos.

-Deberías de hablar al menos con John Ara-  sugirió la joven- Esta demasiado preocupado, y él no tiene la culpa de que Tommy fuera un estúpido idiota.

Arabella  suspiró, sabía que Ada tenía razón, pero  no se sentía del todo bien como para lidiar con alguien más que llevara el mismo apellido de su ahora ex novio, ahora eso pensaba eso pues no había visto a Tommy desde que lo vio besando a Grace y a pesar de que los dos primeros días había insistido al tercero dejó de escuchar la puerta sonar.

...

Cuando Ada la dejó por la tarde volvió a sentarse  en su sofá mientras se hacía un ovillo, y las lágrimas volvían a apoderarse de sus ojos verdes, le dolía el corazón y le dolía el ego, Arabella derramaba lágrimas silenciosas porque creía que era muy probable que ya su llanto con ruido se había agotado.

Entonces volvió a escuchar la puerta ser golpeada, uno, dos, tres y cuatro golpes, su respiración comenzó a ser más acelerada en cuanto escuchaba los golpes en la puerta, y pudo haberse cubierto los oídos de no ser por la voz que escuchó.

-¡Ara!- la voz de John había alcanzado sus oídos finalmente cuando limpiaba unas cuantas lágrimas más - ¡Vamos amor! ¡Abre la puerta!

Había pedido, Arabella suspiró profundamente mientras secaba las lágrimas que seguían cayendo de sus ojos, Ada probablemente tenía razón y no era probable. Realmente la tenía, John no tenía la culpa de los actos que había cometido el gánster era su mejor amigo que solo estaba preocupado por  cómo se encontraba.

Entonces se levantó del sofá en el que se encontraba y llegó hasta la puerta en donde la abrió lentamente, comenzando a apreciar la figura del menor de los tres Shelby, John siempre había estado cuando Arabella era pequeña, cuando unos chicos habían molestado a la castaña solo por qué no quería jugar con ellos, John la defendía y el verlo frente a su puerta con el rostro cargado de preocupación, solo le hizo sentirse la persona más egoísta del mundo.

-Ara- Susurro, entonces la castaña se arrojó a los brazos de su mejor amigo el que la recibió mientras daba ligeros golpes reconfortantes en su espalda - Lo sé cariño, todo va a estar bien.

-Lo odio- Había dicho entre lágrimas mientras se aferraba al cuerpo del Blinder- odio todo esto.

-Y eso está bien- Le dijo una vez que obligó a ambos a ingresar a la casa de la castaña - Tommy te lastimó.