𝟐𝟎| 𝚂𝚒𝚗 𝚎𝚟𝚒𝚍𝚎𝚗𝚌𝚒𝚊𝚜

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Jeff, al sentir los labios de Rachel rápidamente la tomó de la cintura, atrayendo su cuerpo más a él, sus lenguas empezaron a atraparse mientras que sus labios tomaban el mando de la situación. Ningún se atrevía a parar, ya era demasiado tarde para los dos cuando sus manos empezaron a agasajar entre sí, Jeff la tomó las piernas hasta sentarla en la mesa de mármol, Rachel empezó a desabotonar los pantalones de Jeff sin dejar de besarlo.
La mano de Jeff tomo posición sobre sus mejilla así como su nunca, con la otra mano empezó a apretar las piernas de Rachel con brusquedad pero también con placer, ella se quitó la sudadera así como la blusa hasta dejar ver su sostén negro. Los labios de Jeff empezaron a bajar por su cuello mientras que las manos de Rachel se entrelazaban entre sus pelo negro. De alguna forma lo que pasaría está noche no le preocupaba ni siquiera un tramo, no podía pensar si esto podía traer problemas. Cuando las manos de Rachel bajaron hasta su masculinidad Jeff se detuvo y le susurro en el oído

—Rachhoe...

Ella se detuvo pero no porque Jeff se lo pidiera si no por la forma en cómo la había llamado. Rachhoe, era la forma más seguida que Gary le decía, y nadie más la había llamado desde que todo se había ido a la mierda, sus sentidos se congelaron mirando con determinación los ojos pequeños de Jeff

—Lo has descubierto. Me gustas pero este no es el momento, vamos lento Rachhoe—

Ella seguía en silencio mientras Jeff se acomodaba los pantalones, no podía lograr entender cómo es que Jeff le había hecho sentir con tan solo una palabra, como si después de tanto dolor pudiera caminar más despacio sin ser lastimada, acurrucada como Gary solía hacerla sentir

—Será mejor que descanses, se que mueres por mi, pero tenemos tiempo. Te prometo mister misteriosa que me tienes en tus manos—

Jeff la tomó de las mejillas en forma de copa, sus manos estaban frías, ella cerró los ojos al querer calentarlas y sentir un gran alivio, Jeff de nuevo se acercó besando sus labios con suavidad, después tomó el móvil de Rachel, tecleo su móvil para después registrarlo con una llamada

—Ahora tienes mi movil, prometo no molestarte a cada segundo aunque me será difícil porque estoy pensando en ti cada segundo—Jeff le entregó su móvil, ella lo tomó con una sonrisa de lado al ver el número registrado

—¿El inquilino más guapo y ardiente Jeff?—
—¡Seeeeep!¡Ese soy yo!—Dijo guiñando un ojo
—Porsupuesto....—
—Admite que lo soy—
—Depende—
—Pronto lo sabrás guapa, y no tendré ningún problema si me quieres agregar más apodo. Cómo el inquilino sexi ardiente de todo el edificio, el más guapo de la privada, o mi novio sexi—

—¿Mi novio sexi?—Arqueo una ceja
—Podríamos, tendrías a un bombón como novio, creme serás la envidia de todas—Empezó a vacilar
—Si claro....—

Jeff mostró una sonrisa de nuevo besando los labios de Rachel, saborandolos con mucho placer

—Espero verte mañana, mantenme informado si te mudas, prometo ayudarte a encontrar una mejor decoración—Vaciló

Ella asintió, en cuanto Jeff salió del apartamento, ella soltó un suspiro, lamiéndose los labios al recordar lo que había pasado, sacó un segundo móvil de su bolso, en el que solía comunicarse con TH, tenía varias llamadas perdidas. Y en vez de devolver la llamada se dispuso a recoger todo el desastre, y a su vez las nuevas ideas volvían a la cabeza

¿Quién era ese hombre?¿Y porque sabía mi ubicación?¿Ya me había echado un enemigo al bolsillo? Empecé a preocuparme, o si era parte de ¿Davidwache? Tenía que empezar a cuidar mis pasos al menos hasta no conseguir mi objetivo

𝗢𝗻𝗲 𝗢𝗳 𝗨𝘀; Tokio Hotel Donde viven las historias. Descúbrelo ahora