Lorena comienza una nueva vida en Madrid, viviendo con sus amigas, Vicky, Alicia y Miriam, y estudiando un máster de diseño gráfico. Sin embargo, hay algo que no cambia nunca, y son sus ganas de bailar. Es por eso, que decide apuntarse a una academi...
Well, didi you see the flares in the sky? Where you blinding by the light? Did you see the smoke in your eyes, did you, did you? Did you see the sparks, feel the hope? You are not alone. 'cause someone's out there Sending out flares Flares, The Script
El domingo estuve gran parte de la mañana durmiendo, y el resto del día y de la tarde estuve haciendo una pequeña flor de cerezo de crochet que después convertí en un broche para regalárselo a Raquel como agradecimiento por haberse preocupado por mí y haberme acompañado durante toda la noche del viernes. Así que, cuando llegó el lunes por fin, me esperé a que todas mis compañeras se fueran al finalizar la clase y se lo di, muriéndome de la vergüenza mientras abría la bolsita que había fabricado con papel de regalo y un poco de celo para meter la flor, y cuando vi su cara ilusionada con el regalo, se me pasaron todos los nervios.
— Muchas gracias, Lorena, de verdad que no hacía falta que me regalases nada, pero es precioso y me hace muchísima ilusión — dijo observando el broche sin parar de sonreír.
— Es un detallito pequeño para agradecerte lo del viernes — aseguré de la manera más sincera que pude.
— Pues no hace falta que me agradezcas nada porque estoy para eso.
— Pero ya has hecho más que muchas personas que me conocen desde hace años y eso hay que agradecerlo.
Como respuesta, la morena abrió sus brazos y me acercó hacia su cuerpo para estrecharme entre ellos y yo le devolví aquel abrazo que ya empezaba a sentir como un hogar.
— Me encanta el cerezo — añadió en cuanto nos separamos y sus ojos volvieron a posarse en su regalo —. Es mi flor favorita.
— Te pega — concluí dedicándole una sonrisa.
***
La mañana del martes la pasé haciendo algunos trabajos para el máster, aunque no paraba de darle vueltas a la situación que viví el día anterior con Raquel, y en lo bien que me sentía cuando estaba junto a ella.
De repente, como si me hubiera podido leer la mente, recibí una notificación suya de WhatsApp.
Raquel Baile
Hola guapaa 😊 Quería volver a darte las gracias por la florecita, ya la he puesto en mi bolsa de deporte que me llevo a la academia!
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Jo, que ilusión, y que bonita queda 🥺 Y las mismas tonalidades además!
Sii ☺️ Por cierto había pensado en invitarte a un café, refresco o algo mañana, que es festivo, y asi te devuelvo el detalle, que yo no se hacer crochet Si puedes, claro
Miré el mensaje durante un buen rato antes de responder, me estaba poniendo muy nerviosa que me hubiera dicho aquello y no entendía por qué ya que al fin y al cabo, era solo una...¿amiga? No sabía que me pasaba, ni por qué de repente las palmas de las manos empezaron a sudarme, pero decidí responder lo antes posible
