Vᴇɪɴᴛɪᴅᴏs |𝟐𝟐|

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–¿Estas?–Enzo me miro. Recién habíamos llegado a la quinta que había alquilado Matias, pero aún estábamos en el auto.

Baje la visera parasol del auto, mirándome en el espejo y tratando de peinarme con los dedos.

Mire a Enzo, quien ya me estaba mirando con una comisura levemente elevada.

–Vamos.

Salimos del auto, la pequeña puerta de valla estaba abierta así que entramos sin ningún problema.

Matias, Felipe y Juani estaban controlando el asado. Blas, Fran, Pardella, Kuku y Lain estaban en la pileta.

–¡Al fin! No puedo creer que Enzo llego tarde, ¿Qué les paso chicos?–dijo Juani. Enzo y yo aguantamos la risa.

–¡Jo!–me saludo Felipe energéticamente.

Estoy segura que Enzo entendería esto.

–¡Feli!–corrí a abrazarlo, moviendo mi mano de arriba abajo por su espalda, haciéndole caricias.

No quería ni darme vuelta, pero ya sentía la mirada punzante de Enzo en mi nuca. Pero si quería conservar su perfecto rostro iba a tener que sacar sus dotes actorales y hacer el que se alegra por lo mío con Pipe.

Mire a mi hermano, el me sonrió y aún teniendo el tenedor de parrilla en la mano, abrió los brazos, esperando un abrazo. Fui a abrazarlo con una sonrisa gigante en mi cara. Nos habíamos visto hace relativamente poco, pero lo echaba mucho de menos.

–Jochu...–dijo para luego alejarse un poco. Gire mi cabeza hacia la derecha, una chica pelinegra de ojos oscuros y mentón partido se estaba acercando a nosotros con botellas de cerveza. Una sonrisa se formo en su rostro al verme.

–¡Hola!–me saludo Male. La nueva novia de mi hermano. Obvio que le devolví el saludo y luego fui a saludar a los demás.

–No, va a volver conmigo cuando termine de grabar la película. O ya es mayor de edad, puede ir a vivir sola mi chiquita–hablo mi hermano mientras que fingía que lloraba al decir esto ultimo. Estábamos todos haciendo la sobremesa, hablando de que hacia yo luego de que Matias termine de grabar.

Enzo no emitía ni una palabra, él estaba al frente mio, sin dejar de mirar quien estaba a mi lado, a Pipe.

–Jo, ¿Me pasas un hielo?–dijo el castaño de ojos azules susurrando cerca de mi oído, cerca de mi boca mientras ponía una mano en mi pierna. Por alguna razón este tacto me hizo dar un escalofrío, aunque el frío lo sentí cuando le pase el hielo y saco su mano de ahí. Por alguna razón quería que vuelva a tocarme.

Levante la mirada, Enzo estaba distraído, riendo con los chicos. Cuando quise volver al hilo de la conversación, escuche esto:

–Pero re atrevida, ¿Cómo me va a comentar "Fran es re lindo para su edad"–dijo el rubio con vibras de hada, indignado entre risas.

–Pero eso es tierno, a mi me pusieron "Me gustaría ser bruja, poder hacerte un hechizo y ser dueña de tu chorizo"–dijo Enzo, luego todos empezaron a tentarse y contar que les habían dicho cosas parecidas.

–A mi me aparecen todos edits míos con la canción de "Gaucho"–aporto Matias.

–Uy loco, los odio. A mi lo más tierno que me paso es que me filtraron un video borracho cuando era más chico–dijo Juani y todos nos reímos.

𝐎 𝐋 𝐃 𝐄 𝐑 || 𝖤𝗇𝗓𝗈 𝖵𝗈𝗀𝗋𝗂𝗇𝖼𝗂𝖼Where stories live. Discover now