Las pruebas de la muerte [Código 025#] [MO]

Capítulo 17: Instinto de supervivencia.

Inspiré profundo mientras cerraba mis ojos. Estaba en la cuarta prueba, pero no había entrado aun, le daba vueltas a todo, en especial el hecho de que Kilian no hubiera superado la prueba, ¿tan difícil le fue? Era lo que me preguntaba mientras abría poco a poco mis ojos y veía la oscuridad que tenía enfrente mía, dejándome en claro que la siguiente prueba, mis ojos no iban a serme muy útiles.

De pensar que todo esto empezó por un anuncio en la televisión, que Kilian deseaba ir, y ahora nos encontrábamos aquí, siendo uno de los pocos que lograban superar las pruebas. Se decía que los demás no pasaban de la primera, lo que me dejaban con una gran preocupación encima por como era le pensamiento de los demás, ¿tan egoístas eran? ¿Tan vacíos estaban?

Al menos me aliviaba que mis compañeros tuvieran un poco de consciencia y que algunos de mi familia pudieran pasar como mi hermana mayor Tani... Ojalá hubiera tenido el tiempo para hablar con ella.

Aun con ese arrepentimiento, negué con mi cabeza y avancé, ahora que estaba aquí, no podía perder el tiempo, capaz si seguía avanzando podría encontrarme con ella. No contaba con que consiguiera avanzar, pues cada prueba era más difícil, en especial la anterior en la que mis emociones fueron alteradas ante lo ocurrido.

No era una simulación, ¿por qué una simulación me ocultaría nombres? Aparte, se sentía tan real lo ocurrido, como esas emociones eran genuinas o que ese hombre tuviera la decisión de tomar esas acciones tan arriesgadas. Sentía admiración y eso que apenas lo conocía.

A nada más entrar, la puerta tras de mi se cerró y me dejaron en medio de esa oscuridad en la que mis pies ya no sentían en el suelo. Otra vez era esa sensación que tuve al principio, ese vacío en el que me encontraba en medio de lo que parecía ser el universo, aunque en este caso no había ni una sola luz, no había nada más que ese silencio en el que parecía consumirme poco a poco.

Era... extraño no sentir nada, como mis manos buscaban algo con lo que sentirme segura, como intentaba escuchar algo, pero no había nada más que silencio, incluso algo peor que ello. Me daba la sensación de que había algo más peligroso, algo que era consciente de que no ser capaz de percibir tu alrededor era lo que causaba esa ansiedad y duda. Sabía que uno temía cuando el cuerpo no sentía nada, cuando daba la sensación de que solo era el alma en medio de la nada.

¿Qué sabía esa maga? Tenía que saber demasiado, daba la sensación de que había experimentado a lo mejor con la muerte y por ello les dejaba este cuestionamiento, las dudas sobre la importancia de la vida, la muerte y el tiempo... Tan irónico que viniera aquí si deseaba que alguien le diera las respuestas adecuadas, en un mundo donde todos temían la muerte, no valoraban la vida y extendían el tiempo como querían.

—En tu anterior prueba, viste como eran las cosas en la simulación —habló por fin una voz, una que logró sorprenderme y que me girara, o al menos es lo que intentaba, pero no podía sentir que hubiera dado esa vuelta—, viste como ese hombre se sacrificaba por los demás hasta el final. Ahora dime, Nilia, ¿qué crees que ocurrió?

—Aceptó su muerte —respondí con calma.

—¿Por qué crees que murió?

—Su nave estaba en deplorables condiciones y más al proteger a los suyos. Se sentenció al encerrarse ahí hacer de escudo.

—¿Crees que pensó en eso? ¿En la muerte?

Sus preguntas me dejaban muy claro en que esa maga había vivido algo cercano a la muerte o que incluso era un tipo de... ¿mensajera? No lo tenía nada claro, pero respondí a su duda.

—Podría haberlo pensado o a lo mejor vivió los últimos recuerdos de su vida para no pensar en ello. Hay personas que les genera ansiedad pensar en la muerte, pensar que no les queda tiempo y que aprovechan todo lo que tienen o buscan alguna forma de extender su vida... la inmortalidad.