❝Te conocía desde hace mucho tiempo, ¿Quién sabía que esta noche te verías como si fueras mía?❞
━━━━ ✦️️ʾ𝐓𝐇𝐄 𝐀𝐑𝐂𝐇𝐄𝐑 | hay veces en que las almas gemelas están destinadas a pasar toda la eternidad juntas y otras veces lamentablemente están...
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Fue un asunto mediocre.
El día estaba sombrío, la tensión en el aire era palpable. La princesa Visenya había estado acostumbrada a los días lluviosos, había crecido en Bastión de tormentas después de todo y ella misma había nacido en una noche tormentosa, con un estruendo en el cielo su madre dio el último empujón y ella llego la mundo chillando junto a los truenos en el cielo, sin embargo Visenya no estaba acostumbrada a los días con ambientes melancólicos, se había criado entre en la lluvia pero siempre encontró la manera de divertirse y por muy raro que sonara amaba las tormentas, más si eran de noche por que dormía mejor.
Pero ese día simplemente era uno nublado y triste, se suponía que era un día de celebración, la ciudad se había preparado para festejar una boda real pero sin embargo todo se sentía incómodo, nadie lucía verdaderamente contento incluso ella quien era la novia de la boda próxima a realizarse.
El corsé de su vestido era apretado por una sirvienta mientras ella se inclinaba levemente frente a su espejo y veía fijamente su reflejo. Intentaba plasmar una sonrisa en su rostro, fingir qué estaba contenta pero cada que intentó sonreír su rostro se contrajo con una extraña mueca tensa que era de todo menos de felicidad. La princesa se miraba seriamente así misma, respiro profundamente, sentía un hueco en el pecho, un vacío qué nunca iba a poder llenar y que la acompañaría toda su vida desde ese día en adelante.
Sentía que estaba haciendo las cosas mal y ciertamente era más que un sentimiento, ella de verdad estaba cometiendo un grave error pero la princesa conocía el deber para con su madre y por supuesto para con su familia y Visenya podría pecar de muchas cosas pero de ser alguien desobediente a sus deber para con su casa eso jamás. Visenya sabía que muchas veces se necesitaba sacrificar el amor para el buen curso del futuro y eso era lo que ella estaba haciendo por que cuando se elegía el amor antes que el deber… las cosas no salían bien. Pero ciertamente no era una elección fácil o una que la hiciera sentir bien.
“¿No te dije que durmieras? ” la voz de su hermana mayor resonó y la hizo salir de su trance dejando de ver su reflejo en el espejo.
“Tuve una pesadilla” la pelinegra susurró y ciertamente no mintió, había dormido sin embargo se despertó a mitad de la noche después de un sueño atroz que ya no le permitió volver a pegar los ojos nuevamente.
Su hermana Rhaenys y ella tenían poco en común, eran polos opuestos, el día y la noche, sin embargo se amaban incondicionalmente aunque solían demostrar ese amor muy poco, eran muchos los años de diferencia entre ambas pero eso jamás había afectado a su convivencia hasta que la mayor se casó y se apartaron un poco. La muerte de su padre las había puesto en caminos opuestos, cada una afrontó el duelo a su manera y luego de que su abuelo se negara a nombrar a Rhaenys como su heredera nombrando a su tío Baelon y que su madre comprometiera a Visenya con el hijo de este las cosas habían estado tensas entre ambas.
