❝Te conocía desde hace mucho tiempo, ¿Quién sabía que esta noche te verías como si fueras mía?❞
━━━━ ✦️️ʾ𝐓𝐇𝐄 𝐀𝐑𝐂𝐇𝐄𝐑 | hay veces en que las almas gemelas están destinadas a pasar toda la eternidad juntas y otras veces lamentablemente están...
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Se forja oro con fuego y la mujer con sufrimiento.
Visenya tuvo claro eso desde que era muy pequeña. Aún cuando nació siendo una princesa sabía que siendo una mujer en un mundo como el suyo ella no tendría muchas opciones.
Su madre había sido ruda con ella, por lo que Visenya convirtiéndose en madrastra tan joven no quería cometer los mismo errores que su mamá había cometido con ella con la princesa Rhaenyra, la princesa tenía once veranos y Visenya quince veranos, solo habían cuatro años de diferencia entre ellas pero el título madrastra era uno pesado y Visenya lo portaba por lo que sabía que Rhaenyra iba a verla como una figura de autoridad y tal vez como alguien a quien seguir, Visenya solo quería hacer las cosas bien con la princesa. Pasaba más tiempo con ella, jugaban juntas todas las tardes, Visenya se sentía aliviada de poder divertirse incluso si lo hacía con una niña, y es que ambas eran cercanas de edad, Visenya estaba más cerca de la edad de su hijastra qué de la edad de su marido.
En el cielo los últimos rayos de sol alumbraban la tarde anunciando la llegada de la hora del búho, Rhaenyra caminaba a su lado y por inercia tomó la mano de Visenya, su mano parecía increíblemente pequeña enlazada con la mano de la reina mientras la agarraba con fuerza, Visenya sonrió por que era la primera vez que la más pequeña le demostraba confianza de esa manera.
Sin embargo la sonrisa de la pelinegra se borró cuando vio el rostro de la princesa, sus ojos morados estaban abatidos, lucía triste. Demasiado joven para cargar con tanta desesperación “¿Tú serás mi nueva mamá?” su voz apenas se escuchó.
Visenya parpadeo consternada ante la pregunta, aquella había sido una pregunta seria, tenía a su lado a una niña confundida “No” la pelinegra respondió rápidamente y rápidamente se reprendió así misma por ser tan dura “Yo no podría ser tu nueva mamá por que solo tenemos una madre” la chica se sintió torpe, no podía creer que no pudiera manejar una simple pregunta “Yo soy algo así como una amiga… Jamás pretenderé ser tu madre, ese es un rol que jamás podré llenar. Pero tendrás recuerdos de tu madre para atesorar, incluso en los días en que el dolor se sienta insoportable” Visenya le dijo en voz baja, acariciando sus suaves y pálidas mejillas.
“¿Tú me ayudarás a recordarla? ¿Si la olvidó?” la niña hipó y las lágrimas comenzaron a salpicar su cara.
"Por supuesto que lo haré" la pelinegra prometió mientras limpiaba las lágrimas de la princesa. Rhaenyra la abrazó con fuerza y Visenya sonrió grandemente al sentir el abrazo de la platinada. La pelinegra no fue muy apegada a Aemma, de hecho convivió muy poco con ella, pero de lo poco que convivió con lady Arryn puede decir que ella era muy noble y amable, una mujer de un buen corazón qué fue demasiado buena y que los dioses le reclamaron por su bondad e inocencia.
“Su majestad” un joven Harwin Strong se hizo presente llamando la atención de Visenya quien aún no estaba acostumbrada a que la llamaran por aquel título “Él rey y el príncipe la esperan para cenar” la pelinegra asintió en señal de agradecimiento y se encargó de llevar a Rhaenyra con sus damas prometiéndole que regresaría más tarde para leer un cuento antes de dormir.
