¡Especial de Navidad!

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Era la noche buena en la bella ciudad de Londres, pero lamentablemente Arthur y Alfred estaban peleados desde el día anterior, ambos se habían faltado el respeto terriblemente y no habían sido honestos con sus palabras, se habían herido mutuamente y habían dicho cosas al sentirse heridos, ninguno de los dos pensaba que iban a pasar la noche buena solos, era algo deprimente para Alfred, en el caso de Arthur él estaba deprimido por otra cosa, él estaba deprimido por no poder hablar de forma honesta con Alfred, pues estaba acostumbrado a pasar sus navidades solo en los confines de su gran casa, cuando por fin tenía su voz de vuelta lo primero que hacía era ponerse a discutir con Alfred, así es, se sentía frustrado, se dirigió a su jardín de rosas, cortó un par de ellas y las puso en un forero de cristal en el centro de su mesa, definitivamente aquellas eran las rosas que cuidaba con tanto cariño, habían florecido de una forma maravillosa, y le mostraban todo su esplendor y hermosura, absorto en sus pensamientos comenzó a ordenar la mesa para su cena, sin darse cuenta le había dejado un puesto a Alfred, en su mesa en vez de haber solo un plato, solo una copa, había dos, fina y delicadamente puestos, Arthur se percató de esto luego de terminar de poner las cosas, no tenía los ánimos para sacar las cosas e ir a guardarlas, era demasiado pedir, se resignó a preparar la cena, preparo un plato simple y un postre, miró su reloj, aún era demasiado temprano como para cenar así que se sentó en la mesa y recostó su cabeza en sus brazos, y rápidamente se durmió, luego de lo que le pareció un corto tiempo, despertó y se acomodó en el asiento, mirando hacia su alrededor, y para su sorpresa se encontró con la mirada dulce de Alfred, ¿Qué estaba haciendo ahí?, ¿no se supone que estaba en su país, probablemente celebrando con los demás?, pero lo único que pudo decir fue


- Alfred... -


- no esperaba que hubieses puesto un lugar para mí en tu mesa –


- Pero...nosotros estamos—


- Cometí un error al decirte esas cosas...no es así como pienso sobre ti, en realidad dije eso porque estaba dolido y...lo siento – Dijo abrazándole fuertemente, Arthur simplemente le abrazó de vuelta y le murmuró en el oído


- Yo también lo siento mucho, dije cosas estúpidas, fui un completo idiota –


- No es así, no te denigres de esa forma... - Le dijo antes de comenzar a dejar tiernos besos en su cara, partiendo lentamente por su frente, bajando por su nariz, y pasando a sus mejillas, provocando que Inglaterra se sonrojara


- ¡Detente!...me estoy avergonzando mucho... - Le dijo intentando esconder su cara, América rió levemente, queriendo seguir tocando con sus labios su pálido rostro, se alejó para mirarle y rió nuevamente


- Por lo que vi, ya preparaste la cena – Le dijo sonriendo con aquella típica sonrisa que tenía siempre.


- No tienes por qué comerla si no quieres, ya sé que es mala –


- Tal vez no es como la comida de Francia, pero si lo preparaste especialmente para esta ocasión, entonces comeremos – Le dijo caminando hacia la cocina para traer las cosas que faltaban, Arthur se limitó a mirarle sorprendido, normalmente se opondría a comer su comida, pero al parecer hoy era distinto, todo se sentía distinto, como si nada hubiese pasado, y de cierta forma le agradaba sentirse así, al poco tiempo volvió Alfred con el resto de las cosas y se sentó frente a él, sirvió un poco de vino para ambos y dirigió su fuerte mirada a Arthur.


- ¡Ah!, yo serviré los platos – Dijo antes de pararse para servirle a Alfred, usualmente no tenía un aspecto que te diera ganas de comer, pero Alfred se limitó a probar, sorprendiéndose, Arthur le miró con expectación, "Ah claro, ahora es cuando el dice que mi comida está más mala que de costumbre" pensó antes de suspirar.


- Tu comida usualmente no es buena, pero esta está mejor que de costumbre –


Arthur no sabía si sentirse ofendido o halagado, así que simplemente le respondió – Gracias...creo –


Luego de eso ambos se sentaron a cenar, hablando horas y horas sobre el pasado, sobre las cosas que habían pasado entre ellos, buenos y malos recuerdos, su primer beso, su primera vez, una primera confesión, y como se habían sentido mientras aún no se confesaban, así pasaron las horas hasta que llegó la madrugada del día siguiente, era navidad, habían compartido momentos tan lindos, y ahora recordaban cada uno de ellos, Alfred llevó a Arthur al balcón, desde ahí tenía una maravillosa vista del amanecer, el primer amanecer que compartían juntos, el primero de muchos más por venir, y ambos se encargarían que estos fuesen perfectos, se tomaron de las manos mientras miraban como el tímido sol se asomaba entre los edificios.


- ¿Arthur? –


- ¿Si? –


- Feliz navidad –


-Feliz navidad a ti también –


- Te amo –


- Yo también te amo, más que a nadie... - le respondió finalmente mientras apoyaba su cabeza en el hombro de Alfred y este apoyaba su cabeza en la de Arthur, con una tierna sonrisa, ambos estaban siendo honestos con el otro.


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Espero que les haya gustado este especial de navidad –Notese que lo acabo de hacer – y bueno...luego del especial de año nuevo empezaré a seguir con los capítulos normales


ADEMÁS TUVE UNA IDEA PARA OTRO FIC SDFGHJHGFDS, PARA LA GENTE QUE QUIERE LEER MUCHO LEMMON, Arthur es un actor de porno gay, y Alfred un gay que no ha salido del closet y que tiene miedo de decirlo, se conocen en un bar y Alfred lo reconoce y asdfghjhgfd después pasan muchas cosas (¿????) Ya enserio se me ocurrió eso :'(



Silencer. (UsUk)Where stories live. Discover now