Confusión [Grelliam]

Capitulo 8: Es él.

La hora se acerca.
Veo a Thomas correr de forma tan emocionada y estúpidamente descuidada que por un momento me olvido que a causa de eso va a morir.
William está parado junto a mí y parece como si nada hubiera pasado antes, eso me alegra a sobremanera pues no quiero involucrarme mucho con él.

–El alma de un escritor talentoso, ¿Deberíamos dejarlo vivir? Llamemos a los cuarteles y...

–Eso no será necesario. –Me interrumpe y frunzo el ceño– Colectaremos su alma. –Determina con su voz tan horriblemente fría.

– ¡¿Qué?! –Me exalto y le volteo a ver, no puedo creer que éste estúpido esté poniendo en riesgo nuestro futuro– ¿Qué dices? ¿Ya lo olvidaste? Un alma humana que sea útil para el mundo puede ser removida de la lista.

–¿Útil? ¿Te refieres a él?

Obviamente, ¿De quién más estamos hablando? Me quedo con muchísimas ganas de decirlo. Aprieto mis puños por un leve momento.

– ¿No dijiste que su novela era una obra maestra?

– ¿Y por eso crees que debemos dejarlo vivir, Grell Sutcliff?

Engreído. Imbécil.
Arqueo una ceja, respiro profundo.

–Si... ¿Y si así fuera? –Pregunto en un falso modo amable, cubriendo parte del tono retador.

–Rayos... –Murmura.

– ¿Qué? ¿Tienes algún problema con eso?

–No, no tengo ningún problema. –Me dice con tranquilidad– Sin embargo, estás equivocado.

Engreído. Imbécil. Bastardo. Insensato...

–Equivocado, ¿Yo? –Llevo mi mano hacia mi casi inservible guadaña, que a pesar de todo me ha ayudado a hacer muchas cosas, y volteo a verle a los ojos– ¡Eres muy engreído!

Entonces me lanzo hacia él para atacarlo pero su figura rápidamente desaparece de mi camino, y cuando volteo él ya ha llegado atrás de mi, con su guadaña levantada y lista para atacarme. Cuando él golpea contra mi yo lo detengo con mi guadaña y debido a la fuerza que ejerció yo he quedado varios pasos atrás.

–Tú... –Murmuro.

–"Dañar a nuestro compañero afectará el resultado" –Cita él, de una parte de nuestro reglamento.

– ¿Estás diciendo que la otra vez fuiste amable conmigo? –Pregunto. Engreído. Imbécil. Bastardo. Insensato... Estúpido. – Yo, que tengo triple A... ¡Contra ti que solo tienes B!

– ¿Triple A no era solo en Técnica práctica? Además, el requisito que tienen para unirse a los cuarteles es un promedio de B o más.

Mediocre. Es lo único que se me ocurre para describirlo. Odio a las personas mediocres.
Pensar en estar orgulloso o feliz por apenas haber pasado con un promedio de B me parece jodidamente mediocre.
No puedo creer que me haya tocado la suerte de hacer mi trabajo con él, pero bien, me ha sacado de quicio, y ahora estoy increíblemente molesto con ese imbécil.

– ¡No te burles de mi! –Grito mientras corro hacia él para golpearlo o cortarlo con mi guadaña.

Tan engreído, contradiciéndose en algo que él mismo dijo, pareciendo todo este tiempo considerar que ese humano debía vivir, y terminando por convencerme para luego venir a decir que si colectaremos su alma...

Una vez más escapa de mi golpe, tiro uno más y también. De repente siento un terrible dolor en mi estómago. ¿Qué? ¿Qué es esto? Empieza una lluvia de golpes que apenas logro detener. Esto no está bien, estoy desconcentrado. Por primera vez en mucho tiempo estoy siendo... atacado.
Desde arriba. Desde abajo. ¿Qué está pasando? Por el frente... Me aturde, y me encuentro agitado después de aquello, y de repente... Por detrás.
¿Qué infiernos es ésta sensación? Esto... esto es...