Remember.

Capítulo 05: Construyendo muros.

Harry POV.

Mis manos se encontraban dentro de los bolsillos de mi pantalón, mientras caminaba por las solitarias y frías calles de la ciudad, intentando asimilar que quizá la volviese a tener entre mis brazos. Que quizá nuestros recuerdos vuelvan a su memoria y así, comenzar de nuevo.

No me importaba tener que pasar por varios y largos meses de relación, hasta llegar al momento correcto para declararme por segunda vez. No me importaba, no sin con ello la mantenía a mi lado.

Había pasado mes y medio desde que sufrimos aquel maldito accidente que me arrebató parte de mi vida. Un mes y medio de sufrimiento, con el miedo de que ella se marchara para no volver jamás. Tan solo pensar que las probabilidades de que mi peor pesadilla se cumpliera, a pesar de ser pocas, me golpeaba por dentro todas la noches que se abrían paso por mi cabeza, robándome el sueño, provocando miles de insonmios.

Ver recostado su pequeño y delicado cuerpo en una camilla, sin vida, rodeada de cables por todas partes, y su piel maltratada a causa de los golpes y arañazos recibidos esa noche, hacían crecer mi impotencia y desesperación al no poder ser capaz de hacer nada más que sentarme a su lado y susurrar lo felices que hubiésemos llegado a ser, suplicándole que no me dejara, que era la persona más preciada que jamás había tenido entre mis manos, y lo más importante de todo: que la necesitaba. Sin ella, yo estaba perdido. Sin ella, yo era la persona más debil. La amaba, y la sigo amando.

Tal vez valió la pena esperar y no rendirse. Tal vez sí. Porque anoche volví a presenciar sus preciosas gemas azules, que tanto extrañaba observar por horas. Era consciente de que quizá no me recordara, o que para ella fuera uno más entre las personas que había olvidado. Pero mi nombre se escapó de sus labios, acariciándolos sútilmente hasta llegar a mis oídos. Sonaba de una manera tan increíblemente especial, que las pocas fuerzas y esperanzas que mantenía vivas conmigo, se hicieron mayores y prominentes.

Le ayudaría a recordar, le brindaría mi mano como rescate para poder salir del túnel oscuro dónde se encuentra perdida y sola. Yo seré su salvación. Por mi bien y el de todos. La necesito de vuelta en mi vida.

Abby POV.

El olor de harina friéndose en una sartén empezó a colarse por mis fosas nasales, aumentando mi apetito. Anoche, al llegar a casa, ni siquiera cené, tan solo me sacié con dos grandes vasos de agua para reponer la saliva extraviada de mi boca al estar cerca de Harry...

En mi cabeza rondaba un continuo pensamiento sobre él. No podía alejarlo de mi mente tan fácilmente. Simplemente no podía, y me alegraba de poder recordarlo tan cerca. “Sí, soy Harry”. Su voz vino a mis oídos, como si lo tuviera justo detrás de mi cuello. Me estremecí. Era tan roca pero cálida a la vez, que no me cansaría de escucharla durante días.

Abrí mis ojos perezosamente, y de malas ganas, aparté las mantas que cubrían mi cuerpo entero, alejando la masculina voz de mi, y volviendo a la realidad. Hice a mis pies presas de unas suaves zapatillas y me dispuse a bajar a desayunar. Si no me equivocaba, mamá estaba preparando crêpes con sirope de chocolate. Aún mantenía aquella advertencia presente, por lo tanto, ese gesto de caridad y arrepentimiento por su parte no colaboraría en que la olvidara y fingiera que nada de lo ocurrido ayer ha pasado.

 — Buenos días. — Saludé a mi madre, desde la entrada, mientras contemplaba el festín que había formado en la mesa: zumo natural de naranja, chocolate caliente, bacon con huevo, los famosos crêpes con sirope, galletas de todas las variedas, y cantidad de bollos. Dios mío, la boca se me hacía agua. — ¿Qué es todo esto? ¿Un gesto de disculpa? Mamá, esto no te va...

— Abby,— me interrumpió, mientras se giraba, dándome la cara — no es ningún tipo de disculpa, aunque si quieres considerarlo así, no me opongo. Pero quiero que comas. Que comas todo lo que puedas, y recuperes tus fuerzas. No estoy dispuesta a que regreses al hospital.