¡Holy Shit!, I Love You 《YoonKook》

12.-|Olvido|

~•pov Jungkook•~
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Era mañana, podía notarlo sin esfuerzo gracias al reloj en la mesa junto a Jimin. 08:00 am, bastante temprano para mi gusto.

Me quedé fijamente viendo el rostro dormido del peli grisáceo que se mostraba a mi sin expresión, tranquilo, sereno.

Elevé una de mis manos para poder tocar esos carnosos labios rojizos, mordiéndome los propios mientras seguía adormilado como borracho por mis deseos de amor, quería tocarle, besarle.

Faltando pocos milímetros para acortar la distancia de mis dedos y su rostro cuando sus ojos se abrieron de la nada, haciéndome pegar un pequeño grito mientras me caía por el borde contrario de la cama, doliéndome el cuerpo por el choque contra el suelo.

Me levanté poco a poco quejándome, ¿era la segunda vez que probaba el piso?.

Vi nuevamente en dirección a Jimin recordando algo usual en él, de vez en cuando abría sus ojos al dormir, mala costumbre que podía hacer que sus globos oculares se secaran por lo que siempre me veía obligado a cerrarle los párpados, aunque realmente era algo que no me molestaba hacer.

Proseguí a hacerlo rápidamente mientras me sobaba el costado de mi torso tanto como el de mi trasero, ¿caer era exagerado?, tal vez pero una mirada fija en un momento inesperado me congelaba la sangre.

Me senté en la cama exhausto, despertar de esa forma tan poco agradable te agotaba lo suficiente como para poder dormir nuevamente pero me abstuve, el desayuno y la disculpa con Suga eran lo primero en mi lista.

Intenté olvidarme de mis sentimientos y concentrarme en la situación dándome dos firmes palmadas en el rostro para despabilarme por completo, dejando ahora medio soñoliento.

-...Jimin...Jimin... —musité un par de veces en busca de respuesta por parte de mi mejor amigo pero ni siquiera se movió un poco, tan solo se quejó un poco y continuó en su mundo de sueños—

Despertar a Jimin no requería de mucha habilidad que digamos pero aún así había que ser cuidadoso.

Con una de mis manos apreté los orificios nasales del peli grisáceo, impidiéndole así respirar.

No demoró más de unos pocos segundo para que comenzara a remecerse en busca de aire, despertando un tanto asustado mientras me apartaba las manos.

-Así no se despierta a la gente... —musitó con un puchero, notándose que en su sistema aún el sueño dominaba e intentando volver a dormirse—

Bastó con decirle que el desayuno incluía buffet libre para que reaccionara y levantara de inmediato, incluso apresurándome en cuanto a vestirme.

Ambos nos pusimos la ropa en lados opuestos de la habitación, seguía avergonzado por lo que había hecho la noche del día anterior por lo que no quería verle directamente a los ojos, seguramente si llegaba a verle la piel me volvería a calentar por lo que opté por alejarme.

•Ha... ¿en que momento me volví así?...•
Me pregunté en un intento por descubrir mi debilidad en cuanto a Jimin se refería, exhalando un agotado suspiro.

-¿Recién despertamos y ya te cansaste?, ¡que debilucho! — se burló el más bajo, apareciendo junto a mí completamente vestido mientras mi lento yo aún se cambiaba la camiseta del pijama por una camisa—

-Tsk... Déjame...

-¿Te ayudo? —Cuestionó mientras me abotonaba la camisa rápidamente sin esperar mi respuesta. Mis ojos se posaron en él, distrayéndome, hipnotizandome pero poco duró aquel estado en mi, mis ojos se abrieron como platos cuando el de pelo grisáceo me tomó por el pantalón, teniendo la intensión de quitármelos.