Capitulo 31

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Lauren Pov

Había pasado una gran semana junto a Camila pero la hora de que ella partiera para su hogar había llegado, no quería separarme de ella, realmente no lo quería me había acostumbrado tanto en esta semana a estar a su lado que ahora que se había ido me estaba empezando a ser falta. Tome la sudadera color rosa que estaba junto a la cama y que pertenecía a ella y la lleve a mi nariz inhalando profundamente su olor y sus exquisito perfume aun impregnado en ella, tener esa prenda conmigo me hacía recordar los momentos que pasamos juntas cada uno más hermoso que el otro, mi sonrisa se agrando más al recordar la primera noche que habíamos dormido juntas y cuan feliz estaba de tenerla en mis brazos la verdad es que no podía pedirle más a la vida estaba junto al gran amor de mi vida siendo completamente feliz

A veces me pongo a pensar que será de nosotras dentro de unos años ¿seguiremos juntas? ¿Formaremos una familia? ¿Seremos felices para siempre como en los cuentos de las princesas? ¿Oh todo acabara? –niego ante eso, todo menos eso. Lo que menos quisiera seria alejarme de ella no podría soportarlo Camila es todo para mí, es mi complemento, la chica de la cual siempre estuve enamorada y que ahora está a mi lado

Solo hay un pequeño problema aun que nos impide ser completamente felices y ese problema es Austin Mahome, tengo que alejarlo de ella sino no la dejara en paz, ella ya no lo ama y eso es algo que tiene que entender pero esta tan obsesionado con ella que es capaz de hacerle daño y es algo que no puedo permitir que suceda nunca. Mis pensamientos son interrumpidos por los toques de la puerta principal anunciando que alguien ha venido, podría ser mi madre pero no lo creo ya que ella tiene sus propias llaves, o quizás sea Camila de nuevo, mi corazón da un vuelco al pensar en esa posibilidad, pero mi semblante cambia completamente al ver de quien se trata.

-¿Qué haces aquí? –pregunte con brusquedad.

-Esas no son maneras de saludar Jauregui, ¿no te enseñaron buenos modales? Pero bueno no importa, Yo solo vine a dejarte una cosita en claro... no te quiero ver cerca de Camila ¿me entiendes? Ella está conmigo

-Ella no está contigo Austin, cuando vas a entender que no te quiere ya, que lo único que le produces en estos momentos es asco, déjala tú en paz o serás tu quien se las verá conmigo

El dejo escapar una risa irónica y me miro tan intensamente y lleno de rabia que mi piel se erizo ante su mirada tan malvada

-A ver Jauregui, te estoy hablando por las buenas ¿bien? No querrás que me enoje y entonces hay si las cosas se pondrían muy feas para ti. ¿nunca te han dicho que las mujeres ajenas se respetan?

-Oh claro, de la misma manera en la que tu respetaste a Keana y te acostaste con ella. –solté de repente era obvio que eso no se lo esperaba. Que creíste que jamás me iba a enterar?

-Para serte sincero Lauren, Keana es una perra ¿sí? Ella vino a mí y solo se dio el momento, y por lo que pude notar no estaba para nada satisfecha contigo –rio

En esos momentos apreté mis puños con fuerza, quería matarlo a golpes pero no caería en su juego así que guarde silencio. –en fin, te quiero lejos de Camila, ella es mía y jamás la dejare

Y eso fue todo lo que hizo falta para que explotara de rabia y me acerque a l tomándolo por el cuello de su fina camisa y lo lance al suelo enlodado –ella jamás ha sido ni será tuya cerdo asqueroso. –hable dándole un puñetazo en la cara

-Eres una perra Jauregui, -dijo el devolviéndome el puño en la cara y haciéndome caer de espaldas. Para esos momentos yo ya no podía controlarme estaba muy enojada y nadie podía pararme. Le di unos cuantos puños más viendo como su rostro estaba cada vez más lleno de sangre y el casi inconsciente sobre el suelo, me detuve solo al escuchar el fuerte grito de mi madre a mis espaldas ella llego hasta donde estábamos e impidió que siguiera golpeando a Austin.

-Lauren basta –dijo tomándome por los brazos. Pero qué coño haces golpeando a ese chico mira cómo te dejo

-Mama fue el quien llego aquí a buscar problemas y por eso le di su merecido

-Lauren así no se solucionan las cosas, yo no te crie así, estas en serios problemas.

-No puedo permitir que le siga haciendo daño a ella madre que no lo entiendes, ese chico que está ahí tirado –dije señalando a Austin aun tirado en el suelo. Es un loco abusador de mujeres y se merece eso y más, ha venido a amenazarme y es algo que no puedo permitir

-Deberíamos llamar a la policía Lauren

-No serviría de nada lo dejarían libre de inmediato, su padre tiene mucho poder, me encargare de el mama

-¿Y qué harás?. –su voz sonaba muy preocupada y lo podía entender

Me acerque hasta donde estaba Austin tirado y lo tome del brazo levantándolo, cabe destacar que el idiota apenas y se podía mover. –Quiero que te largues ahora mismo de mi casa, no te quiero volver a ver cerca de aquí ni de Camila ¿me has entendido? Oh la próxima te ira peor. El con todo y su labio partido y su cara ensangrentada me siguió retando y murmuro.

-A partir de ahora mantén los ojos bien abiertos Jauregui, porque no sabrás en que momento te llegara la hora de pagar por lo que me has hecho.

Y con esas palabras encendió su auto y arranco a toda velocidad desapareciendo de mi vista, me volví hacia donde estaba mi madre y la abrace como pude ya que sentía un terrible dolor en mis costillas.

-Vamos Lauren curare tus heridas –dijo mi madre dulcemente y solo pude asentir

-Perdón por este desagradable recibimiento madre

-No te preocupes amor, ya paso.

Camila Pov

Después de llegar de la casa de Lauren mi madre nos recibió a Dinah y a mí con un gran almuerzo al que no nos pudimos resistir la verdad es que todo se veía delicioso y mi madre es una buena cocinera.

-Y Camila cuéntame cómo te fue en casa de Dinah –pregunto mi madre

-Pues bien ya saben hicimos muchas cosas hasta cuidar de sus sobrinos

-Yah, -asintió ella. Y dime que son esas marcas rojas en tu cuello? –dijo sin mas señalándome con el tenedor

Casi me atraganto con el pescado en cuanto escuche eso, iba a matar a Lauren por haberme dejado marcada. Voltee a mirar a Dinah que tenía la misma expresión que yo, no lo podía creer. Mi padre y Sofí también miraban expectantes esperando mi respuesta

Aclare mi garganta y por fin hable. – ¿Marcas? ¿Cuáles marcas? –me hice la desentendida. Oh si estas marcas, son... pues...

-Fueron mis sobrinos Sinuhe. –intervino la polinesia. Últimamente están muy tremendos y les da por morder a las personas incluso lo han hecho conmigo.

-Tus sobrinos eh entiendo

-Bueno, bueno nosotras nos retiramos porque tenemos cosas que hacer ¿verdad Dinah?

-Sí, es cierto todo estuvo bueno gracias Sinuhe

Corrimos hasta mi habitación encerrándonos en ella aun no podía creer que se le hubiese ocurrido eso y que mi madre se lo haya creído

-Por dios Jauregui no deja de marcar su territorio. –hablo dinah después de un rato

-Pues está en serios problemas por haberme hecho esto. –fingí enojo. Y tu gracias Dj no sé qué hubiera hecho sin ti

Sentí sus brazos envolverme en un cálido abrazo que me encargue de devolver de la misma manera. –De nada pequeña

     

PASIÓN PROHIBIDA (CAMREN)Onde histórias criam vida. Descubra agora