¡No Dispares! (camren)

Allison

Ally había sido amiga de Lauren desde que tenían memoria, sus padres siempre se llevaron muy bien y compartían algunos negocios juntos, cuando el padre de la ojiverde murió, fue la familia de Ally quienes se hicieron cargo de la empresa, compraron todas las acciones que habían dejado, entregando así todo el dinero a Lauren, lo cual le alcanza para vivir sin necesidad de trabajar.

Sus padres eran buenos empresarios y ella había heredero la habilidad, en sus tiempos libres buscaba especialistas o leía sobre la enfermedad de Lauren, trataba de entender por el infierno que su amiga podría estar pasando, pero al tener esposo y dos hijos pequeños, no podía pasar mucho tiempo con ella. Al principio cuando la ojiverde desaparecía por mucho tiempo, pasaba la noche en vela, llamaba a todos sus conocidos y la buscaba por mar y tierra, aunque la mayoría del tiempo no la encontraba, ahora había tomado algo de distancia, pues sabía que Lauren tenía una compañera, a buenos términos no sabía si eran sólo amigas o mantenían una relación, pero lo que sabía era que ambas sentían algo y eso le bastaba para confiar que estaba en buenas manos; y que la menor con la que la ojiverde compartía tiempo, no dejaría que nada malo le pasara.

Ally era mayor que Lauren, sin embargo, su cariño y apoyo siempre había sido grande, aquella noche tras la visita de amiga subió llorando descontroladamente a su habitación, se recostó junto a su esposo quien la abrazo con ternura "Estará bien" dijo Troy en un tono que ni siquiera él mismo creyó.  "Pronto no sabrá ni su nombre, no podrá comer por si sola... ni ducharse... su estado de ánimo es fatal, todo es culpa de esa maldita enfermedad" su respiración se regularizo después de un periodo, las caricias del amor de su vida la calmaban notablemente, pero el miedo no desaparecía, finalmente logró quedarse dormida.