Del tiempo y su connotación

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Y es que es así:

los días pasan, las mañanas se eternizan.

El café se vuelve frío y tus labios son de seda.

Confeccionas mil abrigos para mi yerto corazón.

Aunque él ya está herido, y todavía cicatriza

millones de llagas del pasado que aún duelen;

porque el dolor nunca se olvida

y las mañanas se eternizan, los días pasan

y es que es así.


El tiempo vuela cuando estoy contigo.

El roce de tus dedos rodeándome la clavícula.

Clavándome tus uñas, haciéndote rogar.

Suspirando en mi mejilla alguna que otra poesía de amor.

La libreta de los sueños vuelve a estar abierta,

a punto de ser escrita por una nueva pluma.

Y es que en el amor, así como en la guerra

solo existen enemigos, barreras y fronteras;

y de pronto llega un mundo que parecía olvidado:

unos labios nuevos dadores de alegría.

Una tela de seda que cura tus heridas.

Un café caliente que te calienta las mejillas.

Una rima en poesía que te devuelve la vida.


El tiempo vuela cuando estás conmigo;

porque sin ti, el mundo gira

y sin ti no tengo abrigo.





En clave de poesíaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora