Weona yeta 2: Yetecidad al doble.

3. Las bromas tienen su límite.

— Mierda odio las cebollas — se quejó Julia.

— Yo igual las odio, todos pagamos el precio — le contesté frotándome los ojos con el antebrazo porque me ardían.

— ¿Por qué Dylan no está pintando las cebollas?

— Porque a diferencia de ustedes soy el único que sabe hacer caramelo — contestó con aires de grandeza. Estábamos en la cocina, la tía de Julia trabajaba aquí así que nos escabullimos con su permiso para tener todo listo.

— ¿Crees que se sienta el olor a cebolla? — preguntó Julia preocupada.

— No, el caramelo de seguro lo esconderá — contesté. Dejé las últimas dos cebollas de ocho en la mesa, me saqué el delantal y me lavé las manos.

— ¿Irás a hacer la segunda parte? — me preguntó Dylan emocionado.

— Si, apenas terminen vayan a ayudarme con la tercera y cuarta parte del plan — le dije. Al salir cerré la puerta con cuidado a sabiendas de que todos estaban en el gimnasio pero nunca falta la mina que está en baño arreglándose el caracho o el weon que está meando. Aún quedaban cuatro horas para que comenzara el baile y aún así todos ya estaban llegando, menos Bethany. Según la información que Cristian dijo ella llegaría y haría su entrada "triunfal" cuando todo estuviera listo. ¿Qué? ¿Creían que el aweonao del Cristian no me iba a ayudar?

Como ninja me fui hasta la sala de los profes y cómo acá todo es la zorra, tenían las medias fotocopiadoras. De una carpeta que tenía en mi mochila saqué un cartel tipo "Se busca" de criminales con una foto de la Beth.

Decía:

"SE BUSCA: BETHANY OLSEN

Información: Peligrosa víbora suelta. Es EXTREMADAMENTE venenosa y voraz, mucho ojo con tu chico esta noche amigas porque esta víbora no dudará en envenenarlo y engullirlo"

Hice unas cien copias que se demoraron como una hora en fotocopiarse. En ese lapso de tiempo las cebollas ya estaban pintadas y con el caramelo listo sólo faltaba que se secara. Una hora más y todo listo.

Mi celular vibró en mi bolsillo del jeans y pegué un salto. ¿Quien fue el chuchetumare que me llama justo ahora?

Ah, el Cristian.

— Dime.

— Ya instalé la cámara que me habías pedido. No hagas ninguna estupidez.

Y cortó.

Bueno le entendía, si nos descubrían los dos podríamos hasta perder la beca y esto es tan importante para él que no lo quiere arruinar.

[...]

Por whatsapp...

Gabi: Aquí Águila 01 reportándose ¿Cómo van las cosas por allá? Cambio.

Dylan: Aquí Pichón 01. Excelente, la víbora aún no llega al nido. Cambio.

Julia: ¿Podrían dejar de escribir como retrasados?

Gabi: Aquí Aguila 01. ¡Pichón 02! Habla adecuadamente. Cambio.

Dylan: Aquí Pichón 01. ¡LA VÍBORA ESTÁ EN EL NIDO, REPITO, ESTÁ EN EL NIDO! Cambio.

Tomé las copias, las metí en la carpeta y corrí hasta el gimnasio. En la entrada me estaban esperando los demás y me dieron mi antifaz. Se me había olvidado esa wea.

Entramos y me sentí re fuera de lugar porque todas estaban con preciosos vestidos y sus antifaces y yo acá con un jeans, mis converse que estaban pal gato, una polera negra de tirantes, un chaleco del Camilo y un moño con todos los pelos paraos.

Nos fuimos a la mesa dónde tenían el ponche y esas típicas weas pero yo saqué una bandeja redonda y con cuidado de que nadie nos viera pusimos las cebollas, quiero decir, manzanas acarameladas. Me puse bien el antifaz y cuando me di la vuelta la vi, ese vestido blanco se veía taaan lindo, una verdadera pena.

Narrador omnisciente.

Gabriela apenas la vio entró en su papel. En cuanto su objetivo se mezcló entre la gente ella hizo lo mismo y tipo mesero le ofreció una manzana.

— Para la bella dama de bello vestido blanco, una manzana — le ofreció y se sintió como la bruja de blanca nieves pero lo único que le importaba era que Beth se creyera Blanca Nieves y tontamente comiera la manzana envenenada.

— Muchas gracias — le dijo ella tomando una — ¿Ustede quie... — se dio la vuelta para ofrecerle a sus amigos y cuando se giró de vuelta para ver a la bruja había desaparecido. No le dio tantas vueltas y se dedicó a probar la apetitosa manzana que tenía en sus manos y a la primera probada se arrepintió soltando un grito que llamó la atención de todo el mundo.

Dylan y Julia estaban casi que se tiraban al piso de risa en una esquina mientras que la Gabi ya se había adelantado al destino de Beth que obviamente era el baño. En el último baño estaba encerrada lista a grabarlo todo. Escandalizada Beth entró al baño con la boca sabiéndole asquerosa y en un pestañeo quedó empapada con un balde golpeándole la cabeza.

Su noche no podía ir peor.

Mientras Beth se lamentaba frente al espejo y Gabi grababa toda la escena Dylan se subió al ducto de ventilacion   V-La Gabi aun no tenía idea de como chucha había logrado subir ahí tampoco- y esparció los carteles cosa que cayeron del "cielo". Todos se alarmaron al principio pero después el gimnasio no tardó mucho en llenarse de risas burlonas.

Cuando nuestra anfitriona volvió toda empapada las miradas fueron a parar directo a ella lo que fue como una inyección adicional de risa para todos los que estaban ahí. Recogió unos de los tantos carteles que aún quedaban y al leerlo su cara se puso roja de la rabia.

— ¿Quién fue? — preguntó buscando a alguien a quien culpar — ¡Díganme quién fue! — gritó. "No voy a llorar, no enfrente de todos". Su novio de en sueño como muchas pensaban que era fue a socorrer a su princesa y la sacó de ahí.

[...]

— ¿Vieron su cara? — preguntó Gabi muriendo se risa. Estaban en casa de Julia, no querían correr riesgos en casa de Dylan o en departamento que Gabi compartía con Cristian.

Dylan suspiró intentando calmarse pero la risa de su amiga no lo dejaba volviendo a reír otra vez. Julia se reía pero por dentro se sentía un poco mal, quizá se habían pasado un poco (mucho) de la raya.

Su peor miedo era que les pillasen.

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HOLA MIS BELLAS💕✨
Estoy super feliz weon 👀
Y ustedes? Espero que les esté gustando mucho, cualquier cosa háblenme, comenten, diganme algo que siento que no les gusta 😂
Adiosss💕

-Javivi