El secreto de Lee

Capítulo 5: ¿Irse o quedarse?

— Les juro que conforme pase el tiempo, les iré respondiendo sus dudas. No digo que lo haré todo ahora, por el momento tengo que protegerla.

— ¿Protegerla de qué? 'Ttebayo - dijo el rubio un poco enojado mientras se cruzaba de brazos.

— Está bien - respondió Neji, conocía a su compañero, Lee hablaría cuando fuese tiempo, no era de los que ocultara secretos porque sí.

El ninja de las cejas grandes se levantó del piso y se limpió sus mallas. Les dijo a sus compañeros que los invitaría a cenar al día siguiente, ya que sus papás saldrían de la aldea y así podría llevar a Lili sin que lo regañen. 

Los tres aceptaron, incluso les sorprendió lo maduro que actuó Naruto ante tal respuesta por parte Lee.

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Kiba por otro lado iba a feliz, había logrado presentarse con la misteriosa chica, era el primero en haber tenido una conversación con ella. 

Sabía que no era una competencia, pero se sentía a la delantera.

Cuando llegó a su casa, se sorprendió porque vio a su amigo fuera del portón de entrada.

— ¡Hey Shino! ¿Por qué no simplemente entraste...? 

— Solo venía a decirte que...

— ¡Adivina con quién logré hablar hoy! - el joven Aburame se sentía un poco molesto de que su amigo lo interrumpiera, así que simplemente ignoró el comentario de Kiba y le dio la noticia.

— Lee dijo que mañana iríamos a cenar y nos contará la historia completa.

Kiba estaba impresionado, sabía que Neji y él lograrían convencer a Lee, pero no supo (afortunadamente) lo mucho que se les complicó lograrlo, gracias al cabeza hueca de Naruto.

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En casa de Lee, un par de horas después de que el chico entrenara, todo era muy silencioso. 

Todos en casa estaban en una reunión. Sin que nadie lo notará, estaba cerca de la puerta de la habitación escuchando lo que pasaba ahí dentro.

— Como saben, la fecha se acerca - esa era la voz de su papá, de inmediato Lee supo de que iban a hablar. Nunca lo habían querido envolver directamente en ese asunto, pero él sabía muy bien toda la historia -. Debemos tomar medidas.

— ¿Que sugieres cariño? - su mamá hablaba ahora, sabía que siempre iba a apoyar a su padre, fuese algo serio o no.