Capítulo 9: El secreto detras del ninjutsu

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POV Omnisciente

Lili se había desmayado. Había pasado todo el día descargando su rabia en un árbol. El calor del día era muy fuerte y ella en ningún momento se detuvo a descansar para comer o beber algo. Su cuerpo se había cansado y exigía un receso. 

Mientras ella tenía sus puños ensangrentados, se la había pasado atacando aquel tronco que estaba ya casi por desaparecer, su cuerpo colapsó y ella terminó tendida en el suelo inconsciente. 

Para suerte de ella, su sensei tenía poco que había llegado y se sorprendió de verla caer. Ya que el mayor no sabía desde qué hora se encontraba ahí.

Al verla ahí tendida, suspiro. Era igual a su querido alumno, tenía una increíble determinación. Levantó el cuerpo adormilado y lastimado de su alumna y se dirigió al hospital. El sol se estaba poniendo cuando cruzó la puerta del hospital.

Al entrar, Sakura Haruno iba de salida después de haber ido a verificar que el cuerpo que llevaron en la tarde era efectivamente de Asuma-sensei. 

Iría a entregar el informe médico a la Hokage, la pelirrosa estaba devastada. Alzó su mirada y vio al sensei más llamativo de toda Konoha. Cuando notó lo que llevaba cargando se acercó corriendo hacia él. Llevaron a Lili a una camilla en uno de los cuartos que no estaban ocupados por otros pacientes, después de eso, Sakura la examinó.

Solo es deshidratación, las cortadas en sus puños y piernas ya quedaron cerradas – contestó con tranquilidad –. Necesita reposar aquí en el hospital. Le exigió mucho en el entrenamiento, ¿eh, Gai-sensei?

Hoy no teníamos entrenamiento. Pasé por el campo mientras buscaba a Lee y me la encontré a ella. Se veía enojada.

— ¿Enojada? – preguntó Sakura algo confundida. Desde que la conoce, ella siempre ha sido muy alegre y sonriente. ¿Que la habrá hecho enojar?

Por otro lado, Shino y Hinata estaban en casa de Kurenai-sensei. Había pasado toda la tarde llorando.

El primero que llegó fue Kiba, quien notó a su amigo un tanto extraño desde que llegó a la casa de su sensei. Shikamaru les había avisado antes de llegar a casa de ella, este les había dicho que le dieran tiempo para decírselo apropiadamente a Kurenai. 

La muerte de Asuma Sarutobi fue un golpe muy duro para todos sus allegados.

Hinata le llevó un té a su sensei, quien estaba sentada en su cama, tapada con su sábana de la cintura para abajo. 

Kiba se había ido unos minutos antes, de alguna manera se sentía incómodo y decidió despedirse de todos. 

Hinata también se tenía que ir, su padre la había citado antes del anochecer, aunque no quería dejar sola a su sensei, le pidió de favor que le hiciera compañía a Kurenai hasta que ella pudiera conciliar el sueño. Shino, quien no tenía nada más que hacer, así que aceptó.

El silencio fue un poco incómodo por un momento, hasta que Kurenai decidió hablar de algo que no fuera la muerte de su novio.

— ¿Quién es

— ¿Perdón? – preguntó Shino algo confundido.

Esa persona que ocupa tus pensamientos – dijo burlona, esa mirada la conocía, era la misma que tenía ella cuando descubrió que le gustaba su compañero de clase.

El secreto de LeeWhere stories live. Discover now