019

1.7K 276 57
                                    

Pequeños hermanos.

Jongdae miraba desde la cocina a la pequeña niña, sus pies apenas tocaban el piso cuando estaba sentada y tal vez era mucho más pequeña de lo que debía ser, tal vez su mirada se veía mucho más desilusionada que la de cualquier niño de ocho años, tal vez a Jongdae le recordaba demasiado a otra persona, tal vez solo estaba siendo insensible al no querer cuidar de ella.

—Me sigue pareciendo una mala idea —comentó Jongdae cuando Minseok se apareció en la sala y le dejó un peluche (que era de Jongdae) a la niña. Minseok solo lo fulminó con la mirada, encendió el televisor para la niña y después se dirigió hasta donde estaba su novio.

—¿Podrías por lo menos no decir eso en alto? —le preguntó y Jongdae hizo un mohín caprichoso.

—Incluso le has dado mi peluche —murmuró en voz baja—. No me gustan los niños.

Aunque no siempre había sido así. Jongdae sabe que no siempre había sido así pero las circunstancias hicieron que ahora así.

—Lo estamos haciendo por Sehun y por Jongin —le recordó Minseok y el corazón de Jongdae se ablandó un poco—. Se ganaron un viaje que no podían perder y sólo son dos días, ellos necesitan su privacidad.

La verdad era que Jongdae estaba feliz por sus amigos ya que desde que los padres de Sehun murieron, este había tenido que hacerse cargo de su hermana menor y Jongin había aceptado a Sehun con la responsabilidad que cargaba, cosa que no muchos hubieran hecho, había aceptado los pocos momentos íntimos y la poca privacidad, había aceptado pasar sus veinte cuidando de la niña de los ojos de Sehun.

Le estaban haciendo un favor casi necesario a sus amigos pero ver a la pequeña ahí, con su viejo peluche entre sus manos, lo hacía sentirse vacío.

—Es... m-mi peluche Min... —murmuró Jongdae como si fuera un niño pequeño pero la verdad era que el dueño del peluche siempre iba a ser otra persona de la que Jongdae no habla más.

Minseok suspiró y colocó su mano en el hombro de Jongdae—. ¿De verdad quieres que se lo quite? —preguntó y Jongdae se mordió los labios para contener un .

—Olvídalo —espetó a cambio mientras juntaba sus cejas con disgusto al observar a la pequeña Yeri viendo caricaturas.

Minseok pasó sus brazos alrededor del cuello de Jongdae para llamar su atención, cosa que por supuesto consiguió—. Te voy a recompensar, lo prometo pero intenta tratar bien a la niña, cuando vamos a casa de los chicos casi siempre es tarde y ella está durmiendo y cuando no lo hace, la ignoras olímpicamente, Sehun me dijo que la intimidas.

Jongdae iba a protestar pero Minseok lo calló con un beso—. No me gusta decir esto pero sabes lo que ha pasado la niña... —Jongdae sintió una punzada en su corazón y se relajó un poco, de alguna manera él entiende a la pequeña.

Está bien pensó Jongdae pero no lo dijo, en cambio se dirigió a la cocina—. Voy a cocinarle algo decente a la niña —porque últimamente solo habían comido cosas fáciles de hacer ya que el hecho de que Jongdae no tuviera trabajo influía demasiado en su economía.

Minseok le dio el visto bueno a la tarea que se había propuesto su novio.

—Yeri si necesitas algo puedes decirme a mi o a Jongdae cualquier cosa y si tienes algún problema... También debes decirnos —le dijo Minseok a la pequeña y está solo soltó un casi inaudible "sí".

Enough ; Chenmin | Xiuchen  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora