zayn, eres gay - ziam

35: EL VENCEDOR DE LA APUESTA.

— Es un placer tenerte aquí, Zayn. — Murmuró el papá de Liam mientras levantaba su copa con champaña. — Por una bonita, estable y saludable relación que dure por toda una eternidad. Por mi bebé y su novio, Zayn. — Comentó orgullosamente.

Al ver a Liam, observé en su cara y en su mirada que nunca había estado más feliz y casi me daban ganas de llorar al respecto.

— Liam, he hablado con tu terapeuta más frecuentemente y me dice lo bien que va tu tratamiento. ¿Cómo te sientes? —

— Muy bien, mamá. Zayn nunca me deja solo y siempre está cuidando equis o ye cosa. Cuando salimos, siempre nos mantenemos al margen de multitudes de personas. Es una persona maravillosa. —

— Lo dices por que vives conmigo, tonto. — Musité bromeando. Tomé su mano bajo la mesa y guardamos contacto visual.

Suspiré cuando vi a su papá llorando.

¿Qué hace ahora uno?

¿A dónde me tiro?

— Muchas gracias, hijo. — Me observó, no fui capaz de verle a los ojos. — Cuando Liam era pequeño, no podíamos ni sacarle de la casa por que en la puerta ya se ahogaba o desmayaba. Simplemente, junto a ti a hecho un gran avance en su condición. Y por más que sea loco el decirle, tu haz sido el mejor tratamiento de Liam. Le haz enseñado a vivir y yo...— Tartamudeaba. — Yo fui un patán al salir así ese día. Ustedes son una pareja hermosa y se merecen lo mejor. — Se levantó de su silla y caminó hacia nosotros.

Nos abrazó con mucha fuerza. Yo no supe que hacer. Pero cuando vi a Liam, este lloraba, por lo que respetuosamente seguí el abrazo.

Esto significaba mucho más para la relación padre e hijo de ellos dos que para mí con mi suegro.

Aparte, que pinches raros de llorar tanto. Liam y su familia (a pesar de no ser su familia biológica) compartían mucho el sentimentalismo.

Además, había ganado al apuesta. Una muy emocional disculpa.