Capítulo 38

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Jon se la quedo mirando bastante confundido y sin contestarle, por lo que ella continuo:

-Digamos que tal vez intento aprovecharme de ti...

Ahora el corazón de Jon empezó a latir apresuradamente. No entendía... o prefería no entender.

-No te comprendo...-le dijo lentamente.

-Es que...he estado pensando... No has bautizado a Nathan...

Sintió como si de golpe le hubieran echado un balde de agua helada. Así de sorprendido... así de aliviado.

-Que?!

-Que no lo has bautizado... ni has mencionado eso. Y he pensado... ¿porque?

-Porque... porque... no lo se-tartamudeo- No había pensado en eso...

-Bien... yo solo quisiera... si lo piensas... si consideraras el bautizarlo... me gustaría ser su madrina, Jon...

Jon sonrió y cerro los ojos con una increíble sensación de alivio que no quiso analizar en ese momento.

- No te molesta que te lo pida?... No tienes obligación de todos modos, si quisieras elegir a alguien mas...-empezó Meg apresuradamente.

-No... claro que no. A quien mas iba a decirle? Quien mejor que tú? Por supuesto que estaría muy feliz de que fueras su madrina. Por favor...

-Gracias, Jon. No sabes lo feliz que me haces. Es que... lo quiero tanto, sabes?-le respondió algo emocionada.

-Lo se... y se que a Emily le hubiera gustado también. Estoy seguro.

Se quedo un momento callado al notar que su amiga empezaba a lagrimear y que él tendía a ir por el mismo camino, así que trato de cambiar de tono.

-Eso si... se me plantea un duro problema. Que hago con el padrino?

Meg sonrió entre lágrimas.

-Pues dile a Charly... Esta parte de la familia ya tiene lo que quería. Stu tendrá que aguantarse por no pedírtelo primero. Charly se lo merece, ¿no crees?

-Si, eso creo.

-Bueno... voy a llevarlo a su cuna. Duerme otro rato, luego te subiré el almuerzo...-dijo yendo hacia la puerta.

-No hace falta, Meg... puedo levantarme.

-No discutas... no puedo gritarte con mi ahijado en los brazos. Haz lo que te digo. Descansa.

Salio de la habitación entornando ligeramente la puerta. Jon se estiro en la cama suspirando con los ojos cerrados. Se sentía mucho mejor. Mas relajado. Sonrió levemente al pensar en Meg como madrina de su hijo... Pero que confusión le había creado por un momento! Le dio la impresión, creyó... que se le estaba insinuando!

"Estas completamente loco, Jon. Ahora lo que te falta es tener temor de cualquier mujer que se te acerque. Pensar que todas tienen las mismas intenciones que Jenny... Es una falta de respeto hacia Meg tan solo que lo hayas pensado..."

Tenia que tratar de calmar su mente, se disparaba hacia cualquier parte, y no tenia idea de porque. Volvió a suspirar. "Solo trata de dormir un poco."


Jon comió bastante bien, considerando que no tenia nada de hambre. Se esforzó por complacer a Meg. Y también porque realmente quería recuperarse rápido y dejar de dar tantas molestias. Luego se quedo a solas, diciéndole que iba a dormir una siesta. Pero lo que en realidad quería era un poco de soledad para pensar. Necesitaba ordenar sus pensamientos y tratar de encontrar una salida a sus problemas. Cuando Stu volvió, casi a mitad de la tarde, creyó tener al menos un indicio de lo que debía hacer. No iba a ser fácil, pero no le encontraba otra salida. Así que cuando Stuart vino a verlo, quiso comunicárselo en seguida. Pero su aspecto cansado y preocupado lo detuvo un poco.

Otra vida, otra historia.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora