espontáneo; Levi Ackerman [En Edición]

Capítulo 13

La titán se volcó a verme, su mirada chocaba contra la mía.

—¡No seré tu postre! —aclaré vacilante. Velozmente me aproximé a ella y con agilidad le hice un corte en su cuello— tampoco tu manjar — y de nuevo volví a deslizar mis cuchillas varias veces por su piel, rompí los músculos y ligamentos de sus piernas, haciéndola caer al piso. Llena de enojo le escupí en su cara — te va a ir muy mal —aclaré mientras recordaba la muerte de mis hermanos. George, Ray, esto lo hago por ustedes. La cegué de nuevo y me aseguré de que sus brazos no se regeneraran. No iba a poder yo sola, mis navajas estaban gastadas y sin darme cuenta me las acabe. Cerré fuertemente mis ojos; lágrimas escurrieron por mi rostro, casi lograba terminar con este titán, pero la desventaja la tuve yo. De nuevo una pluma blanca bajo desde el cielo, está no estaba cubierta de sangre. El titán abrió uno de sus ojos viéndome.

—Tú te lo buscaste –comenté aprovechando los cortos minutos que me quedaban de vida. Cerré mis ojos y deje ir un suspiro— Ayres; fuiste lo mejor que me pudo haber pasado en la vida y Levi... Bueno es algo, complejo—reí melancólicamente al recordar todos esos momentos que pase con ellos.

La titán recobró sus fuerzas, solo tenía una oportunidad de romper los músculos de sus brazos y ya.

Miré mis dos ultimas cuchillas. Me dejé ir contra la titan y sin dudarlo comencé a romper los músculos de sus brazos hasta que... sentí como ella me jalaba de uno de los cables del equipo, me tenía, era mi fin. Cerré mis ojos suavemente esperando a que esto terminara rápido, pero todo retumbó.

—¡No! —se escuchó por todo el bosque la voz de Eren. No puede ser... el...
Ella me sujetó fuertemente entre su mano, y me acercó hasta su boca, hasta que... sentí como me alejaron bruscamente y la titan me soltó. Salí disparada hacia un árbol que hizo golpearme la cabeza y está comenzará sangrar, caí al suelo boca abajo sintiendo como cada parte de mi cuerpo se incrustaba en el césped. Lentamente me moví para ver a Eren convertido en un titan, el... me había salvado la vida. Mi labio sangró al igual que mi cabeza, inundando mi rostro de sangre, el dolor era agudo e insoportable. Si el titán no me había matado el dolor lo haría, apenas podía mantener mis ojos abiertos... hasta que los cerré, viendo todo oscuro.

"Liese"

Escuché una voz que me llamaba a lo lejos... esa voz... no podía ser.

—¡George, Ray! —grité a todo pulmón mientras esperaba a encontrarme con mis hermanitos. Toque mi cara y baje mi vista a ver mis manos; estaban más relucientes que nada.

—¿Liese? —escuché preguntar la voz de George detrás de mis espaldas. Me volqué para girar a verlo, y ahí estaban los dos angélicamente parados. La clara cabellera y esos ojos azules celestes de George me veían atónitamente, Ray me veía con una sonrisa muy amplia. Una lágrima rogaba por resbalar por la orilla de mi ojo.
Sin pensarlo dos veces corrí hacia ellos y los abracé entre mis brazos.