La Apuesta

Capitulo 1

Como pude ser tan ingenua, nunca debí de creer en él, ese maldito, después de todo lo que pasamos juntos pero claro, él solo quería aprovecharse de mí, solo quería ganar esa apuesta.

Hasta hoy me doy cuenta que eso nunca tuvo sentido, él y yo por favor eso nunca podría pasar. El típico chico rudo y popular enamorado de la noche a la mañana de la tímida nerd jaja pero que ingenua fui, recuerdo cuando Abril y yo juramos nunca cambiar ni enamorarnos de los populares, Abril, mi mejor amiga, bueno en realidad no creo que sigamos siendo amigas después de que la abandone y lo peor de todo es que la abandone por ese idiota, no puedo creer en lo que me convertí, como pude ser tan estúpida.

Corro, corro lo más rápido que puedo, mientras las lágrimas caen sin parar. Quiero ir con Abril pero no sé si aún quiera verme o si me dará una patada en el trasero y me dirá lo estúpida que fui, si lo hace no podría esperar menos pues me lo tengo merecido por convertirme en algo diferente. Falta poco para llegar a la casa de mi mejor amiga, pero diversas imágenes de él riéndose de mí me atormentan, no desaparecen, ¿Cómo habrán disfrutado reírse de mí con la perra de Ashley? Esos dos, esos despreciables seres sin corazón que lo único que hacen es hacer sufrir a los demás, los odio.

Al fin he llegado a la casa de Abril, toco el timbre y recuerdo cuando fue la última vez que vine a verla, un año, un maldito año lleno de mentiras, las lágrimas corren por mi rostro y no puedo evitar sentirme destruida. Toco el timbre, y puedo escuchar los pasos de alguien venir, Abril, ella abre la puerta con una hermosa sonrisa pero tan solo verme esta se le borra y su rostro se llena de confusión y dolor.

-Hola- dice cortante

-Hola Abril-bajo la cabeza y limpio esas estúpidas lagrimas

-¿Qué haces aquí?

-Yo-Yo- no aguanto más y caigo de rodillas frente a Abril -perd-perdón, yo-yo lo siento fui una tonta, nunca debí abandonarte, perdón-ella no dice nada y espero lo peor, ahora es el momento en el que me comenzara a gritar lo estúpida que fui y lo merezco, pero entonces ella se arrodilla y me abraza

- Tranquila Daira, todo estará bien- dice acariciando mi espalda

-Pe-Pero fui tan estúpida, te abandone por él, por ese idiota, ¿cómo es que no me odias?

-Hey, Daira yo no te odio, puede que te hayas alejado de mi pero yo nunca te daría la espalda y mucho menos ahora que me necesitas

- Abril- digo mientras le devuelvo el abrazo- te quiero

-Y yo a ti Daira, pero anda vamos adentro por un gran pedazo de pizza, que sé te hará sentir mejor - mis ojos se llenan de lágrimas- no quiero que llores y aunque aún no me has dicho porque estas así, creo saber cuál fue la razón- agacho la cabeza, ella me conoce tan bien, y no puede ser que no me haya dado cuenta en lo falso que era mi romance con ese traidor- y esa razón tiene nombre y apellido ¿No?- asiento pues no puedo mirarla a los ojos, no después de abandonarla- Zac Johnson.