01

14.7K 1.4K 402
                                    

-Papá! voy a llegar tarde. Apresúrate

Ya era otro día, pero con la única diferencia de que Min Yoongi no estaba presente.

- Aquí tienes tu fruta picada y tu batido. Pasare por ti a las cinco.

-De acuerdo.

La rutina no esta dándome cambios. Luego de dejar a Mark en su escuela pase por el supermercado y llegue a casa para hacer mi almuerzo y dejar todo impecable. Luego de un rato llego mi hora de irme al trabajo y salir de casa.

-Buenos días Jimin

-Buenos días Jungkook

A la mierda. ¿Algún día tendré una conversación real con él? Por amor de Dios Jimin, encontraste a tu esposo teniendo sexo con una zorra ayer y ya estas pensando en tener avances con tu vecino.

Corrí por mi auto y tome el camino para ir a mi trabajo. Me preocupe tanto por el desayuno de Mark que olvide preparar algo para mi, ya tendré tiempo en la oficina de un café.

Cuando entre al edificio, Hoseok me recibió con su característica sonrisa de recepcionista.

Llevamos trabajando juntos por mas de seis años y medio. Lo conocí junto a su pareja TaeHyung en un bar que solía visitar los domingos en la noche con Yoongi, al final le hable sobre mi trabajo y la bacante que había para alguien que atendiera la sala de espera.

Y el chico que viene entrando con cara de querer matar a alguien es mi amigo Seokjin, a el lo conozco desde la universidad, y son esos años de amistad los que me hacen saber cuando esta pasando por momentos complicados. La amistad y el hecho de que Hoseok ya me conto sobre sus problemas con Namjoon.

-Es un maldito hijo de puta, estoy harto.

-Buenos días para ti también, Jin-Dije burlón

-Deberías moderar tu lenguaje, estamos en el trabajo -Sugirió Hoseok mientras buscaba algo en su cajón.

-Me vale una mierda -Dijo Jin mientras se servía un café de la maquina.

-A ver, ¿Qué ocurrió esta vez?-Intervine yo, uniéndome a la conversación

-Esta mañana le prepare su desayuno favorito, cuando me di cuenta ya se había ido a trabajar.

Trate de conectar miradas de desconcierto con Hoseok, pero él estaba tirado en el suelo buscando quien sabe que cosas.

-Jin, eso no suena como un problema.

-¿Qué no lo es? Por Dios Hoseok, las cosas con él empezaron a decaer desde hace mucho, ya ni siquiera recuerdo la ultima vez que tuvimos sexo.

Me quede pensando en su respuesta. Realmente su relación con Namjoon estaba decayendo con el paso del tiempo, ¿Pero que ahí de mi? Todo mi matrimonio perfecto se fue al caño en cuestión de minutos, y yo solo actuaba como si no hubiera sucedido nada y todo en mi casa siguiera intacto. Tal vez actuó así porque se que Yoongi llegara a casa para pedirme perdón y tratara de restaurar su error, todo lo sentía como un guion que ya había leído, aunque nunca me había sucedido.

-Ayer cuando llegue a casa encontré a Yoongi con una zorra en nuestra cama -solté de pronto-En mi cama-susurre para mi

Hoseok y Jin se quedaron viéndome. No me importa, si Jin puede venir al trabajo a contar sus problemas, yo tenia el mismo derecho. Después de todo son mis amigos.

-Eso es muy...triste.

-No es triste Hoseok, es deplorable. ¿Cómo se le ocurre hacerle eso a ChimChim?

Claro, no hay nadie mejor para defenderme que alguien que esta pasando por algo similar. Aunque Namjoon no se iba con otras personas, el solo estaba perdiendo el interés por Jin.

-Fue un gusto hablar con ustedes, pero tengo mucho trabajo y debo pasar por Mark a la escuela.

Y sin esperar respuesta, me serví otra taza de café y me encerré en la oficina.

Δ

El reloj marca las 4:30, tiempo perfecto para salir del trabajo y recoger a Mark de sus clases particulares. Agarro mi abrigo y doy un ultimo vistazo a mi escritorio.

-Nos vemos mañana chicos

digo mientras busco las llaves de mi auto entre mi abrigo, pero Hoseok me detuvo antes de que saliera del edificio.

-No iras a ninguna parte.

-¿Que? Oye Ho, no tengo tiempo para tus juegos. Debo recoger a mi hijo.

-Tu te quedaras aquí y me darás tu teléfono-Me extendió la mano para que le diera mi móvil.

-¿Qué piensas hacer? -Cuestione mientras le daba mi IPhone con funda de panditas

-Ya te enteraras.

Mientras que Hoseok presionaba la pantalla de mi teléfono, Jin salió de su área de trabajo y camino hacia nosotros.

-¿Hola? ¿Mark?

-¿Por qué llamas a mi hijo?-Susurre luego de que me hiciera una seña de que guardara silencio.

-Mira -Seguía hablándole al telefono- ya tienes dieciséis así que por hoy pide un taxi y vete a casa. Tu padre llegara tarde.

-¿Qué mierda crees que haces?-grite después de que cortara la llamada y me devolviera el móvil.

-Ustedes dos -señalo a Jin y después a mi-Necesitan un descanso

-¿Qué clase de descanso? -pregunto Jin

-Es obvio. Iremos a beber a un buen bar y si tienen suerte... tendrán sexo con un desconocido. Me lo agradecen mañana.

Me quede de pie pensando en el plan que tenia Hoseok, pero agradecía que aun quedaba algo de responsabilidad en mi.

-Yo no iré, debo estar al pendiente de Mark y preparar la cena.

-¿Estas bromeando? -Jin me miro confuso

-No, no lo estoy. Es solo que a diferencia de ustedes dos, yo tengo un hijo y sigo casado.

Al parecer mi comentario les daba risa como para un mes, y mas Jin con la risa que despertaba a media ciudad. Tenia amigos poco serios, pero yo decía la verdad, Mark siempre ha sido mi mayor preocupación y después de todo seguía casado con Yoongi.

-Recalculemos -Hablo Jin- Llevas dieciséis años cuidando a tu hijo hasta el cansancio, y apenas ayer encontraste a tu adorado Yoongi compartiendo tu cama con otra.

-Jin tiene razón. Entiendo un poco lo de Mark, pero ¿Enserio crees que tu matrimonio aun existe?

Me lo pensé por unos segundos.

- A la mierda.

ΔΔΔ


Padre Rebelde | KookminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora