¡Papá-teme es mío~ttebayo! |NaruSasu/ EDITANDO|

Temporada 1. Capítulo 7

Sasuke se encontraba en la cocina preparando la comida para la noche, Naruto a la lejanía se escuchaba jugar en el patio, su risa y sus fuertes gritos eran suficientes para saber que estaba ahí pero un momento de silencio reino por unos cortos minutos, extrañado por la ausencia de ruido y antes de que fuera a buscar al menor la puerta se empezó abrir.

—Papá-teme.— hablo el pequeño niño, abriendo un poco la puerta que separaba el patio y la cocina, el azabache se volteó preocupado pues la voz del infante se escuchaba incómoda.—Hay un señor afuera de la casa desde hace rato.— respondió, antes de que el uchiha pudiera preguntar.

—Está bien Cariño, ven.— el ojinegro hablo, extendió sus manos para poder cargar al rubio menor quien feliz acepto los brazos de su Sasuke. El mayor camino hacia afuera, obligando que Naruto escondiera su cabeza en la separación que había entre su cuello y hombro. 

Pudo ver a un hombre de traje negro, enfrente de la casa, recargado en un lujosos carro rojo mientras fumaba, y cuando vio a Sasuke rió separando su cigarro de sus labios. 

El Uchiha sintió estremecer todo su cuerpo con esa sonrisa, se sintió diminuto con aquellos intensos ojos verdes que le penetraban el alma. Tenía miedo, y Naruto lo noto, saliendo del pequeño trance en el que estuvo oliendo la esencia del ojinegro, giró su cabeza hacia dónde Sasuke miraba aterrorizado y sorprendido, frunció el ceño cuando vio que aquel señor se acercaba a la casa. 

Sasuke entró en pánico y su corazón empezó a latir con rapidez ante la adrenalina que comenzó a sentir, rápidamente llevo a Naruto dentro de la casa, y lo dejo en el sofá, asustando al menor con su rostro mostrando la desesperación y miedo que invadía cada célula de su cuerpo.

—Naruto no salgas, para nada, ¿entiendes?— los ojos azules del rubio se cristalizaron por la tensión que se sentía.—No bebé, por favor no llores, necesito que seas fuerte, ¿si? Tienes que quedarte aquí pase lo que pase, enciende la televisión y pon el volumen alto.—

—No te vayas.—lamento entre sollozos y lágrimas cayendo de sus ojos, agarro los brazos del Uchiha para después aferrado a su cuello cuando lo estiro.—Papá-teme tengo miedo no te vayas.— suplicó, y Sasuke no dejaba de sentir el pequeño cuerpo del niño temblando en sus brazos.

Y aquel momento se dio cuenta de lo mal que estaba actuando, debía de mostrarse fuerte y seguro, no pedirle a un niño de 8 años que fuera fuerte, él debía de serlo.

Pero malamente siempre quería depender del rubio, por el hecho de que era su alma destinada.

Sasuke separó al niño y le miro, con una tranquilidad engañosa y sus labios mostrando una curva. Acaricio la espalda del más pequeño, y Naruto se quedó quieto, sollozando, pero ya había dejado de llorar, porque se sentía relajado, Sasuke lo hacía sentir así. 

—Tranquilo Naru, es una cosa entre adultos, ¿si? Terminando vamos por un helado.— un nudo sé formó en su garganta por sus palabras, aferrándose a ese terminado, y rogando que nada malo pasara en esta situación. Deposito un beso en la frente del menor, y Naruto le regaló una sonrisa al azabache. No estaba seguro de que podía pasar pero iba a proteger a ese niño sin importar que. 

Deja aun lado su descanso para levantarse del sofá en camino hacia la puerta, miro al niño por última vez y a su pequeña sonrisa antes de separar la puerta y ponerle el seguro al estar afuera. Dejo salir un profundo suspiro de sus labios, cerró los ojos intentando encontrar esa valentía que necesitaba ahora. 

 —Me hiciste esperar mucho.— esa voz ronca resonaba en las paredes internas de su mente, ahora y siempre, sintiendo ese escalofrío recorrer todo su cuerpo.