Final

1.8K 161 24
                                    

¿Qué hacer cuando te sientes vacío? Y ya no sabes a donde ir y tus ojos no encuentran nada en específico porque todo es similar hasta marearte.

Parece que estás caminando a través de la oscuridad y al salir, sonríes con fuerza para verte bien por quienes están fuera de ese tunel. Tus pasos parecen sin rumbo, incluso te cuestionas si estás viviendo de verdad o tan sólo te engañas a ti y a todos, fingiendo estar bien.

"Ojalá alguien pueda ver que hoy no puedo seguir y me ayude, que me regale un gesto, tan siquiera un abrazo" pero no sucede, nadie sabe que estás mal, tal vez eres culpable de eso, después de todo, finges tan bien que hasta tú, ya lo empezaste a creer.

(...)

No esperó que sus actos fueran egoístas pero los sentía de esa manera.

Las cartas que recibió de Sasuke fueron quemadas, no lo odiaba. Lo ama con cada bocanada de aire que toma, y refuerza el latido de su corazón, sin embargo, era imposible tenerlas cerca suyo.

Porque estaba roto, más después de aquello. Pues claramente, está fallándole a las palabras que el Uchiha intentó trasmitirle.

Pero simplemente no puede vivir una vida donde Sasuke no esté e ignorar que su esencia no quedó impregnada en cada minúsculo espectro de su vida.

Aunque nadie pareció conocer ese corazón entregado que lo recibió y arropó cuando desesperado, buscaba paz. Aquel rostro agobiado, devastado a través de unas ojeras que vivían abajo de una mirada pura; tan clara que todo parecía correcto en su presencia.

A un cuerpo delgado, y moretones formados alrededor, a la sonrisa quebrada que regalaba sinceramente, con toda la fuerza que podía reunir para mostrarse bien.

Aquella pequeña espalda que en sus mejores sueños recuerda, tan frágil en sus brazos; vulnerable y esperanzado del calor que compartía a su cuerpo frío, a la espeluznante, bizarra y hermosa unión que compartía la marca con su piel. Las venas resaltando alrededor de ese lugar, lo profundo que parece verse, seguro, doloroso por cada pequeña mueca que Sasuke mostró.

Lo piensa tanto, cada día, cada noche; cada pequeño milisegundo de su nefasta vida, extraña cada una de esas pequeñas cosas que ama de Sasuke. Por eso, no puede fingir seguir con una realidad donde no se encuentra cuando se volvió su todo.

Y sabía que, si lo estuviera viendo, seguro estaría molesto con él. Porque lo sabe, Naruto sabe cuanto Sasuke quería una vida normal para él, tanto qué pasó años alejado de su presencia para resguardar su bienestar, en una relación dominante y un sitio dónde era maltratado. Todo por su sonrisa, por esos ojos azules y cuerpo diminuto que ansiaba protegerle a través de unos pequeños brazos que no podía rodearle.

¿Cómo puede vivir después de eso?

No creía lograrlo, las personas hablaban tan fácil de superación pero seguro, en ningún momento, sufrieron algo similar. Perder su todo, lo que era, su propio corazón y esperanzas, era Sasuke.

Así que deja que todo se resbale de sus manos, que ese algo, oscuro y pesado lo incruste en su cama. No sabe cuanto tiempo ha pasado, ni los días que han cursado desde que se recostó a lamentarse, hundiéndose en su propia miseria. Hasta que sus párpados dolieran, y ardieran con cada pequeño movimiento que intenta hacer.

Asegura ya pasó mucho tiempo, porque su cuerpo deteriorado; sucio y oloroso lo asegura. Su estómago pidiendo lo necesario para sobrevivir, suplicándole piedad pero su mente no reacciona, se empeña a producir recuerdos que duelen más que su cuerpo adolorido por estar en la cama tanto tiempo, en un mismo espacio donde sus huesos rechinarán en un movimiento.

¡Papá-teme es mío~ttebayo!    |NaruSasu/ EDITANDO| Donde viven las historias. Descúbrelo ahora