El campeón es mi vecino

Thalia, el campeón y el pokelito.

Un nuevo día en Pueblo Po, en la región de Alola y tenemos a una Serena que se levanta temprano, con la idea de ir a comprar comida e ingredientes para hacer sus famosos pokelitos para el vecindario como muestra de amabilidad y de querer llevar e bien con todos su vecinos.

Salió al balcón que daba a la calle y vio alrededor, era una mañana tranquila, bueno siempre sería así si te despiertas a las 5, pero bueno no había nadie salvo un hombre con una niña que llevaba del brazo y un pikachu en su hombro en la entrada de la casa de la Sra Cruz. Serena sé le hacía conocida la silueta del hombre que tenía tomada de la mano a una niña, que por lo que deducía era Thalia, entonces el debía ser el padre de la niña.

La Sra Cruz abrió y recibió a la niña, mientras ella se despedía con un abrazo del hombre, acto seguido, saco una pokebola de la cual salió un charizard y tomó vuelo en su lomo, se pudo escuchar a Thalia decir "adiós papi, que te vaya bien, adiós"
El hombre desapareció y en ningún momento pudo verle la cara, pero algo se le hacía familiar con la silueta del hombre.

Serena salió de su casa para poder comprar comida e ingredientes para sus pokelitos, se metió a una tienda de bayas donde encontró gran variedad de ellas, compro gran cantidad y pidió a pangoro que cargará las bayas por ella, él pobre panda apenas y podía, Serena prácticamente había vaciado el local.

-Parece que la nueva residente de pueblo Po trae algo entre manos, jaja.- una curiosa chica un poco más pequeña que Serena, de cabellos morados y un vestido casual negro y morado, estaba parada frente a ella.

-Oh, hola.- ella la saludo alegremente.

-Jeje, aquí decimos Alola y no hola- la chica mantenía su semblante alegre

Serena se volteó a ayudar a su amigo panda con 2 bolsas-tu pareces buena persona, puede que el campeón se lleve bien contigo, en fin debe de ser por eso que te mudarse a lado no?

Serena no entendió y se giró a verla, pero ella ya había desaparecido, le pregunto a su pokemon si la vio, este negó haberlo hecho.

Luego de eso la chica y el panda se dirigieron a un mercado donde compraron toda la comida que necesitarían ella y sus pokemon, cabe aclarar que fue demasiada y el pobre tipo lucha tenía que cargar con ella.

De regreso se encontraron a la Sra Cruz que iba con Thalia rumbo a su floreria, la saludo y le recordó que todavía quería ver su invernadero.

Al entrar en su casa se encontró con sylveon y delphox comiendo bayas en los sillones, raro, pues de donde las habían sacado. Ambas pokemon la guiaron al patio donde había unos árboles de bayas, cayó comicamente pues se hubiera ahorrado el dinero de las que había en el patio.

Entró e hizo el desayuno para ella y sus pokemon.

Después de terminar y de lavar los trastes, Serena fue a su cuarto y se cambió para cocinar sus pokelitos, además de que se trajo a la cocina un reproductor que Clemont le regalado en uno de sus cumpleaños y un disco que Bonnie le regaló en el mismo.

El disco, según Bonnie era un recordatorio del viaje que hicieron por Kalos, por lo que tenía canciones que según ella la harían sentir como si viajaran de nuevo los 4.

Colocó la música y con ayuda de sus tres pokemon comenzó a hacer los pokelitos.

Ella preparó cerca de 40 pokelitos, 10 por cada vivienda, ella quería dar una buena impresión a sus nuevos vecinos.

Mientras los preparaba, ella los iba haciendo de acuerdo a la música que escuchaba, por lo que habían algunos muy llamativos, unos con rasgos de los iniciales de Kalos, otros con forma de pokebola, uno amarillo con un rayito amarillo en la punta, uno verde con un círculo rojo en la punta, uno amarillo con relámpagos negros, uno con una key stone, etc.