Tiempo Prestado [Adaptación Nalu]

Capítulo 19 B

-qué mañanera -dijo Jellal, cuando bajo a las nueva para echar un vistazo al horno. Se encontró a Lucy sentada al lado del árbol, decaída. No le dijo nada, pero adivinó que había estado pensando mucho y que echaba de menos a Natsu. A Jellal le dio pena. Estuvieron charlando un rato en la cocina, pero no de él. A las diez bajó Erza, diciendo que ya tenía ardor de estómago.

-El próximo lo parirás tú- dijo mirando fijamente a Jellal.

-Por mi, encantado- dijo Jellal- pero no puedo.

-Casi lo consigo - finalizo Erza.

Lucy se ofreció a preparar el desayuno para las tres.

-Tú en la cocina eres un peligro- rezongó Erza, haciendo reír a su hermana.

-Es verdad, y eso lo heredé de mamá.

-No, señora. Mira, papá era un cocinero malísimo, pero mamá es que ni sabe dónde está la cocina.

-Creo que Sting le gusta cocinar- dijo Lucy- Al menos sabemos que mamá no pasará hambre cuando sea vieja, si es que llega a prescindir de la cocina.

-¡Tú crees que durarán, Lucy?- peguntó Erza. Le resultaba difícil creerlo. Estaba convencida de que lo suyo era algo pasajero, que tarde o temprano él reaccionaría y acabaría buscándose a alguien de su edad. Pero debía reconocer que parecía feliz con Irene, y en absoluto preocupado por la enorme diferencia de edad.

-Yo creo que si mamá fuera hombre, ni siquiera nos haríamos esa pregunta- respondió Lucy- Hay mucho hombres de la edad de ella que se casan con mujeres más jóvenes que Sting, y nadie se extraña. Si él tuviera sesenta y dos y ella treinta y nueve, no le sorprendería a nadie.

-Quizás tengas razón- concedió Erza- Lo más curioso es que hacen  buena pareja. Él es un poco retro, para ser tan joven.

-Yo no saldría con él- dijo Lucy, y se rieron. Sting parecía mucho mayor que Natsu, cuando de hecho era solo dos años más viejo que el actor.

-Bueno, yo menos- dijo Erza, y hubo más carcajadas- Entiendo tu punto de vista. Si Sting es un poco anticuado. Ahora ya casi nadie usa traje todo el día. Eso a mamá le encanta. De hecho él, ya tenía esa pinta la primera vez que le vi, mucho antes de que se liara con nuestra querida madre. Yo creo le ponen las mujeres mayores.

-Eso parece. O quizás solo mamá. Sting besa el suelo que ella pisa. Y la verdad es que si la cosa dura, nosotras nos beneficiaremos a corto plazo. Mamá será feliz.

-¿Y cuándo sea vieja? Quiero decir vieja, muy vieja...

-Pues lo mismo que el resto de nosotros- intervino Jellal- Uno espera que su pareja no se le muera, o que no lo deje. Y eso, tarde o temprano, ocurre- Miró con ternura a Erza.

-Yo nunca te dejaré- le prometió Erza- Tienes mi palabra.

-Más te vale- Jellal se inclinó para darle un beso (n/a: me encanto la imagen, ya chao)