La Gata Rusa 3 [Actualizaciones LENTAS ]

Devuelta a Rusia

Después de que me dieron de alta volvimos a Rusia, incluidos Katsuki y Otabek. Katsuki porque ahora era esposo de Viktor y Otabek porque al ser una vez más temporada "baja" podía ir a donde fuera así que decidió viajar con nosotros.

Estaba realmente feliz de que mis amigos siguieran conmigo, los sentía más reales que nunca.

—¿No están emocionados por volver a casa? —preguntó Viktor mientras miraba por la ventanilla del avión, mi asiento se encontraba frente al suyo y a mi lado viajaba mi amiga. —Estoy seguro de que mucha gente estará esperando vernos el el aeropuerto.

—Me alegra regresar a casa. —admití. —Pero no estoy dispuesta a enfrentar a la gente, le fallé a la nación.

—Estas exagerando. —dijo el ruso mayor. —No le fallaste a nadie, hiciste lo mejor y diste tu mayor esfuerzo. —pude sentir una mano posarse sobre mi hombro, giré la cabeza para ver a mi amiga quien me sonreía con pesar, yo había perdido la competencia, pero ella había dejado todo atrás para seguirme a cualquier lado. Dejó Kazajistán y al convento, ignoro a su familia y me siguió fielmente, le sonreí de vuelta.

—Cualquier lugar a tu lado es mi hogar. —dijo Katsuki, estaba segura de que estaban acurrucados, la cabeza del japonés sobre el hombro de mi paisano y la cabeza de este sobre la cabellera del pelinegro.

—Estoy agradecido de volver, estos días fueron los más difíciles de mi vida. —dijo la gata rusa. —Pude sentir que me moría. —soltó un largo suspiro.

Estábamos conversando dentro de la cabina como si no existieran los demás pasajeros, habíamos perdido el vuelo que la asociación pagó así que tuvimos que arreglarnos de alguna manera para regresar a Rusia con nuestros ingresos, así que estábamos viajando en clase turista con personas de diferentes nacionalidades, diferentes lenguajes y claramente, diferentes vidas.

Desde mi alta del hospital Yuri no me había dirigido la palabra, no de manera directa, yo lanzaba una pregunta a nuestros amigos y él contestaba, pero cuando intentaba acercarme se alejaba y se refugiaba con Otabek.

Al llegar al aeropuerto internacional de mi país natal Claudia tuvo que ayudarme a bajar del transporte aéreo, tenía que usar muletas hasta que tuviera la fuerza suficiente para poder estar de pie sin ayuda, pero con los vuelos y la hopitalizacion mi madre había decidido mantenerme en casa, y aprovechar un poco del seguro que poseía para que el hospital más cercano de casa me proporcionará rehabilitación.

Mientras que mi amiga y compañera esperaba en la cinta eléctrica para recoger nuestras cosas, yo estaba sentada en la sala de espera con lentes oscuros y una sudadera negra para que la gente no me reconociera, no podía soportar la idea de que era la chica que le había fallado a Rusia.
El equipo nacional era adulado, recibía gritos de emoción mientras eran rodeados por cuentas de personas, podía ver gente aplaudiendo, escuchaba las capturas de las cámaras, veía como Viktor elevaba un brazo para saludar al gentío mientras que su esposo se mantenía un par de pasos atrás siendo seguidos por nuestros amigos, Otabek mantenía su semblante serio y Yuri lo imitaba, Mila mostraba su blanca sonrisa mientras caminaba a lado de Jacob. Ese era el equipo de Rusia, esas eran las personas elevaban el nombre de nuestro país mientras que yo estaba sentada con mi pierna estirada.

—Aquí estas. —dijo Claudia al llegar frente a mi, se veía agitada, algo que era bastante claro, cargaba con mis maletas y las suyas. —¿No deberías estar con ellos? —señaló a mi equipo y negué con la cabeza.

—No debería, por ahora se acabó mi vida en el patinaje. —eleve lo los hombros, me apoye del respaldo del asiento y me levante. —Antes de mostrarme a las cámaras me recuperare, volveré a la pista después de mi rehabilitación.

Me sujete del hombro de Claudia 6 mientras ella daba pequeños pasos y un hombre ponía nuestras maletas en un carrito tranpostador avanzabamos a la par de Yuri quien se limitó a mirarme sin decir palabra alguna, el chico me estaba evitando, eso era algo claro, debía ser su método de protección.

Al llegar a la entrada del lugar mi madre detuvo un taxi, adentro mis maletas y las de Claudia en la cajuela y me pidió que subiera, giré la cabeza para ver como el equipo subía a la típica camioneta y antes de que Otabek subiera me miro y elevó su mano en forma de saludo, luego la cabeza de Viktor salió de una ventana.

—¿No vendrás? —me grito con una sonrisa. —Eres parte del equipo. —di un paso hacía la camioneta y cuando mi pierna herida hizo contacto con es asfalto sentí un agudo dolor que me hizo soltar un grito e inmediatamente Claudia me sostuvo.

—Deberíamos ir con tu madre. —opinó mi amiga y me llevo al taxi mientras veía como lentamente la camioneta se alejaba de mi, mi único sueño de alejaba junto con mi llegada a Rusia.

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Hola, hubo un comentario esta mañana que me pidió seguir escribiendo, lamento haberlos abandonado.

Quiero agradecer su espera y que sigan aquí (si es que siguen aquí)

Me costaba seguir escribiendo, espero que esperan cada actualización con amor y gusto.