No regrets

3.6K 268 21
                                    

-P-apá ¿porqué sigues queriendo a Harry si él es malo contigo?- Preguntó el pequeño hijo de la pareja, frotándose uno de sus ojos con la palma de la mano

Louis suspiró

-Porque nos quiere- mintió.

-Tú lo quieres?- preguntó algo adormilado. Eran ya las dos de la madrugada y Harry no aparecía por la puerta. Louis lo pensó durante unos segundos. Volvió a suspirar

-Eres muy pequeño y es muy tarde para hablar de estas cosas, que además son cosas de grandes- Tomo al pequeño entre sus brazos y lo llevó a su habitación

-Aun piensas en ella? En mamá-preguntó él pequeño ya casi dormido. Louis suspiró por tercera ves y beso su frente sin antes susurrarle un "Siempre lo hago".

Bajo las escaleras. Harry apareció por la puerta principal tambaleándose. borracho. No solo el olor a alcohol lo delataba, pues su cara brillaba y sus Risos estaban revueltos. Quizás estuvo con alguien. Pero Louis no reclamaría, ya hace bastante que no lo hacía y el estado en el que estaba le daba mucho miedo. Recién se recuperaba del ojo morado del hace unos días.

-Te dije que no me esperaras despierto- Harry llegó hasta él y beso su frente. A Louis le dio asco. El olor a alcohol le causaba nauseas. La vos de su dueño era inestable pero logro entenderle

-Es, es que Nico tuvo otra pesadilla y no podía dormir - paso un brazo por el hombro de harry para ayudarlo a subir las escaleras pero este se negó diciendo que podía solo

Llegaron al cuarto
-Te dije, te ordene que no le dieras dulces a ese niño - Harry se quito toda su ropa quedando en boxers. Louis deseaba decirle que se diera un baño de agua fría, que olía horrible y que no quería compartir la cama con alguien así. Pero le ayudo a quitarse las botas.

-Lo siento- miró al más alto. Se veía complacido con aquella disculpa dolorosa. Claro que Louis no lo sentía, era SU hijo, le daría los dulces que él quisiera aunque aquello no fuese lo que había ocurrido.

-Ven aquí bebé -Ordenó Harry. Louis tragó saliva. Lentamente y sin respirar se adentro a la cama

-Me extrañaste?, no nos vimos en todo el día y anoche el mocoso nos interrumpio- Louis podía sentir la bilis subir por su garganta, pero aún así asintió a todo con media sonrisa en su rostro. Harry rodó su pequeño cuerpo con el de él, dejando a Louis como una pequeña niña asustada bajo su gran torso desnudo.
Louis no pudo seguir acumulando aire y lo soltó como un gemido cansado,a lo que Harry interpreto como deseó. Comenzó besando el cuello del mas bajo, dejando pequeños chupetones en cada rincón, esparciendo aquella fragancia nauseabunda para Louis. Cerró sus ojos, pensando, metiéndose en la mente que solo sería otra noche mas que debía soportar por su hijo.

Harry bajo más sus besos llegando lenta y torpe mente a la clavícula de Louis. Gruñendo por el increíble y majestuoso olor que emanaba su pequeño. Beso y lamió toda la zona. Cuando los besos pasaron por su ombligo se detuvo. Miró el cuerpo rígido de Louis y roso su gran y varonil nariz por su entrepierna para relajarlo.

-Voy a lograr que toques las estrellas- susurró. "Como si pudieras" pensó Louis mientras Harry bajaba su pillama y con el su ropa interior y el resto de su ropa. Cuando quedo desnudo sabía que Harry no escatimara en detalles y solo apoyó todo su cuerpo sobre él.

-Quieres que entre en ti bebé? - preguntó Harry. Pero Louis sabía que si le decía que no, las cosas pasarían igual y también sabía que era mejor para su salud no tentar a la suerte.

-S-si- apoyó la mano sobre la nuca de Harry llevando su rostro directo a su tibio cuello, evitando que este quiera besarlo. Y Harry comenzó a embestirlo. Una y otra y otra ves. La cama rechinaba. Louis rogaba que el ruido no despertase a su hijo o harry podría enojarse. Pero Harry no cooperaba, él gemía muy fuerte, gruñidos escapaban de su boca. Louis no hablaba. Resistía cada puñalada con fuerza. Como si su vida dependiera de eso, y talvez lo hacía.

-Eres mío, Louis, tan mío- Repetía harry cada ves que las envestidas eran mas duras y letales. Louis miraba un punto muerto en el techo, nada se lograba ver, gracias a las luces apagadas pero no importaba. Se mentalizada en otro lugar, con su hijo.

- Díme que lo quieres!- Los gemido de Harry lo traía de nuevo al infierno

-Te, te quiero Harry- mentir era su mejor costumbre

One Shot LSWhere stories live. Discover now