Mi lindo Vampiro.

5: Quiero conocerte.

Los humanos no son buenos para entablar relaciones de cualquier tipo, pero si sabían hacer un buen café pensó Meison mientras bebía un café y leía el diario observando el paisaje.

De todos los malditos lugares tenía que venir hacia aquí, enserio parece acosador serial o tengo la peor de las suertes en coincidencia, ese maldito tonto está aquí, porque de todos los lugares a donde podría ir viene al lugar donde trabajo.

-¿Hmm mirando al chico sexy Zhia?.Pregunto una de las camareras sorprendiendo por detrás a Benio quien estaba espiando al vampiro detrás de una columna.

-Demonios Miranda, me vas a matar de un susto. Dijo sorprendida.

-Sehhh el susto, ¿Y bien?,¿Espiamos o no al chico sexy?.

-No espiamos, es solo que no paro de cruzármelo sin razón alguna.

-¿Y no hablaste con él?,¿Qué te pasa?... .Dijo indignada dándole un empujón.

- Si hable, ya estaba harta pero... créeme, él no es lo que parece, digo si es lindo pero parece creerse por encima de los demás.

-Vamos Zhia, ve a atender la mesa del chico sexy, su café se está terminando y no quiero que se vaya.

-La gerente otra vez está tratando de atraer gente con chicos sexys.Dijo Miranda muy animadamente.

-Estrategias son estrategias. Dijo la mujer muy despreocupadamente.

-Yo no quiero ir que vaya Miranda. Dijo refunfuñando Benio.

-Tú no decides, ve de una buena vez o no vengas más. Dijo la gerente poniéndose firme, Benio no pudo hacer más que acomodar su delantal negro e ir hacia la mesa en donde estaba Meison sumido en el periódico.

-... .Ella aclaro su garganta al ver que él no se daba cuenta de que estaba allí.-¿Mas café... señor?.

-¿Qué haces aquí?. Dijo sorprendido al verla de pie a la mesa con una jarra de café en sus manos.

-¿Qué parece?. Dijo señalando el logo de su delantal.

-Así que trabajas aquí.

-¿Vas a querer más o no?.

-Si, por favor. Dijo con una sonrisa socarrona mirándola mientras le servía el café en la taza que el levantaba hacia ella.

-Disfrútalo.

-El café no es la bebida que más me apasiona pero gracias. Dijo de una manera extrañamente seductora.

-Listo. Ella quiso irse pero el la sujeto de la muñeca.-¿Qué haces?.

-Quiero hablar contigo.

-No seas hipócrita, suéltame que estoy trabajando.

La solté pero no me daría por vencido no me gustaba tener malos entendidos menos con un humano ella quiso irse nuevamente pero para detenerla me tuve que levantar y volver a sujetar su mano haciendo que todo el mundo nos mirase.

-Te esperare afuera cuando termines de trabajar.

-¿Qué diablos te pasa?, vete me avergüenzas. Dijo haciéndose un pequeño ovillo roja como un tomate, tan tempestuosa sonrojándose .

-Puedo soportar que todos ellos me miren, no me iré hasta que prometas que hablaremos.

-Bien...bien suéltame. Dijo zafándose bruscamente.

De manera asustada se fue caminando rápidamente se quieto el delantal y se sentó pesadamente en el banco que había en el vestidor, pero su paz no duro Miranda entro intempestivamente y cerro con fuerza detrás de sí.