Mi lindo Vampiro.

35: Un viaje con muchos nervios

-Hmm... dime que no sigues molesta. Dijo con ojos de cachorrito mientras subíamos las maletas.

-Por enésima vez Meison ya no... pero lo estaré si sigues preguntándome lo estaré.

-Me gusta estar así contigo por más tiempo. Dijo amorosamente abrasándola.

-A mí me da pena Han parecía al borde de un ataque de nervios por todo lo que le dejaste.

-Nahh, es resistente , se queja por deporte.

-Deja de esclavizarlo o se vengara de ti.

-Ya sube cariño, o no te soltare ni dejare de besarte. Dijo arrinconándola contra el auto.

-... Si... sí. El que me llamase cariño sonó especial esta vez tenía un tono que jamás había usado, se sintió tan raro que extrañamente aflojo mis rodillas, espero que él no lo haya notado, me sentía acalorada y mareada, creo que me estoy volviendo loca.

-Bien... vamos a pasarla bien. Dijo robándome un dulce beso.

...

No Era la primera vez que viajaba en avión, pero el abrumado cotorreo de un aeropuerto internacional era agotador, Meison parecía más que acostumbrado, parecía más como si estuviese tomando un bus, me veía tan simple, pero eso se me olvidaba cuando me tomo de la mano para caminar por el pasillo hasta el avión, el muy amablemente me dio el asiento de la ventana por más que solo fuese ver muchas nubes.

-¿Nerviosa cariño?... Zhia ¿Qué sucede?. Estaba desmejorada, su piel se sentía tibia y su corazón latía a mil por hora.

-Nada... se siente raro cuando me llamas cariño... cielos parece como si tuviese fiebre, me siento tan tonta.

-Tranquila... ¿Por qué no duermes hasta que bajemos?, seguramente es estrés por un viaje tan largo en avión.

-Gracias Meison. Eso fue lo último que dije, me dormí tan rápido que hasta que resulto extraño.

No sabía que estaba tan avanzado, la famosa luna roja un tema del que todos preguntan, un periodo de calor para un vampiro y no solo el sexual, calor en todo sentido, tener un vínculo nos apacigua, al sentir el deseo del otro eso disminuye, si no sería como tener adrenalina las veinticuatro horas en el cuerpo, cualquier cosa nos saca, nos hace enojar y no distinguimos nada, si es con un igual el vínculo el otro siente nuestras sensaciones y las maneja para calmarnos pero si es solo un humano es más problemático para él no se siente en control de lo que le sucede porque no son sus sentimientos, Hank me advirtió al ser un vínculo real y fuerte que tengo con ella a medida que se acerca el periodo más fuerte de la luna roja ella lo siente más profundo; siento miedo de todo lo que tengo que contarle, de abrumarla con tanto peso, de causarle tanto daño por quererla tanto.

Justo cuando pienso en que esto es demasiado para que ella sepa, se da vuelta y me abrasa como si fuese una almohada gigante, había adquirido esa costumbre hace unos días atrás abrasándome suavemente, recargando su rostro sobre mi hombro y colocando una de sus manos sobre mi corazón, pedí a la sobrecargo una manta, me miro con envidia por como la trataba, cubrí a Zhia con ella, la azafata se alejó pero vi como sutilmente me señalaba, estaba siendo la comidilla del vuelo; si iban a charlar sobre mi les daría tema, les sonreí muy amablemente y bese la frente de mi preciosa contraparte, ellas se ruborizaron y cerraron las cortinas... mi preciosa mitad, tan frágil y delicada, tan hermosa ...tiene mi corazón en sus manos.

...

-Hey dormilona... ya llegamos. Dijo Meison susurrando a mi oído y yo como siempre, como un pequeño tomate rojo, mientras un escalofrió recorría todo mi cuerpo.