Espero que lo entienda.

2.4K 140 98
                                    

Por más que lo intenté, esa noche no pude dormir. Y no fue precisamente por el dolor punzante que me dejó la violación, sino porque realmente me estaba sobrepasando el tema. Me sentía muy culpable, si tan solo no le hubiera ordenado ir por esa maldita guadaña, probablemente Kayn no estaría pasando toda esta mierda, aunque de por sí estaba favoreciendo mucho a mis planes. Aún así, estaba preocupado por él pero al mismo tiempo me hizo enojar demasiado con esto. Podría decir que llegué a pensar en matarlo en su momento, pero mi razonamiento fue más fuerte. Pude haberme librado de él, por supuesto, pero... Necesitaba saber de qué era capaz ese lado suyo, necesitaba saber, experimentar, demostrar que era lo suficientemente duro para aguantar lo que sea. Una violación no es nada, aunque debo admitir que prefiero a Kayn bajó sumisión. No sirvo de sumiso, en cualquier contexto lo arruino todo, ni como alumno ni como amante....

Esa noche le di vueltas a muchos temas, y recordé a alguien crucial, mi ex maestro... Kusho. Esa vez que me imploró perdón por haberme fallado y enseguida lo maté ¿Acaso se estaba repitiendo la historia?

Esa mañana me levanté temprano, dejando a Kayn durmiendo en mi cama. Me dirigí de inmediato al calabozo donde me encontré con el noxiano, ya sabía lo que debía hacer.

Permanecía recostado en el suelo apoyando su espalda en la pared, parecía dormido. Le di una patada a la reja alertándolo.

-"Tu de nuevo."- Dijo despertando.

-"Envidio que hasta un prisionero en su primera noche encarcelado haya podido dormir y yo no."- Dije.

-"¿Eh?"-

-"Nada, solo pensé en voz alta."-

Me quedé observando al prisionero, no podía observar bien su rostro, su capucha me lo impedía. Necesitaba recordar a quienes mataba, porque sí, al parecer no quedaba otra opción que hacerlo yo. Abrí la celda y entré sin ningún apuro. El noxiano hizo un forcejeo inútil con sus muñecas esposadas lo que me provocó una leve risa que solo yo pude notar. Al estar frente a él me agaché y le quité la capucha.

Para mi sorpresa, era bastante joven, debía pasar a Kayn por un par de años solamente. Fue entonces cuando noté algo importante, su mirada... Esa expresión la había visto antes...

-"¿Qué tanto me ves?"- Preguntó de mala gana.

Entonces fue cuando recordé: Esa misma expresión, pérdida, furiosa, frustrada... Era la misma que tenía Kayn cuando lo encontré.

-"Sin duda odias tu destino."- Comenté.

-"Supongo que no había elección."- Dijo.

-"¿Eres soldado de Noxus?"-

-"Pertenezco a la élite de asesinos de Noxus, así que se podría decir que sí."-

-"¿Se podría?"-

Me miró con desprecio.

-"¿Esto es un interrogatorio antes de morir? Qué fastidio, solo mátame y ya."-

Había aceptado su destino.

-"¿No te vas a resistir?"-

-"¿Y cómo lo haría? Estoy esposado frente a un líder de un clan asesino con prácticas sombrías, me quitaron mis armas, apenas he comido y me duele todo el cuerpo."-

-"No eres un verdadero noxiano."- Comenté.

-"O tal vez tengo más motivos para morir que para vivir."-

¿Enserio era de Noxus?

-"Insisto, ningún noxiano diría eso."-

-"¡Bien, bien! Tal vez no debí haber nacido en Noxus ¿Pero ya qué? Así fue, y alcancé un grado bastante alto sin siquiera querer tenerlo. Así es la vida en general, los que siempre han estado arriba son los que permanecen en lo alto."-

[Hiatus] Mi preciada arma. (Zed x Kayn)Where stories live. Discover now