Manteniendo la calma.

2.4K 141 325
                                    

-"¿Acaso con esto no nos habíamos reconciliado?"-

-"Sí, en parte."- Respondió.

-"¿Entonces?"-

-"Kayn..."-

Zed se puso serio mirándome a los ojos. Parecía buscar las palabras exactas, comenzaba a preocuparme.

-"¿Zed? Me estás asustando."-

-"Lo siento, para mi es un poco difícil decirte esto. Tendré que desaparecer por un tiempo, no sé cuánto exactamente, pero seguramente no será poco."-

-"¿Eh?"- Me sorprendí.

-"La guardia joniana está planeando recuperar sus antiguos templos, incluyendo el nuestro. Entenderás que no puedo permitirlo, ya me adueñé de él y no voy a tener piedad con nadie que quiera quitármelo. Debo averiguar varias cosas por mi cuenta, y retomar mis entrenamientos extremos."-

-"¿Y me lo dices ahora? ¡¿Porqué no lo dijiste antes?!"-

-"Porque quería que disfrutas de nuestras últimas caricias hasta quizás cuánto más. Prometo volver, no dejaré que ningún poca cosa me derrote."-

-"Zed... ¿No puedes llevarme contigo?'-

-"¿Y a quien le confiaría la orden? Debes quedarte Kayn, y demostrarme que ya eres un hombre y que puedes dirigir un grupo. Yo a tu edad ya tenía varios discípulos, es hora de que vayas demostrando tu poder al resto y que lo enseñes."- Me dijo acariciando mi mejilla.

-"P-pero Zed... ¿Y si todo se sale de control? ¿Y si me invaden cuando tú no estés?"-

-"Confío en tí, Kayn."-

Abracé a Zed apoyando mi cara en su pecho. Aproveché de captar su olor, lo extrañaría. Nunca nos habíamos separado por mucho tiempo, lo máximo habían sido un par de días y no estaba acostumbrado a su ausencia.

-"¿Cuándo te vas?"-

-"Mañana temprano."-

-"¿Puedo dormir contigo?"-

-"Por supuesto, quiero estar contigo estos últimos momentos."-

Al escuchar eso lo abracé más fuerte.

-"No te pongas así Kayn, ya te dije que volvería, ¿No confías?"-

-"Confío, pero te extrañaré, Zed."-

Zed sonrió.

-"No entiendo como un hombre como tú puede parecerme tan lindo."-

-"Agh, no empieces."- Dije sonrojado.

-"También te extrañaré."- Dijo.

Ya era bastante tarde, así que  dormimos de inmediato. Esa noche Zed me enrolló en sus brazos e intentó relajarme masajeando mi cabeza. Tenía un nudo en el estómago, me preocupaba mucho el que sería de mi sin él por quien sabe cuánto tiempo. Era una gran responsabilidad, tenía que demostrar que ya era un adulto.

A la mañana siguiente me desperté, pero Zed ya no estaba en la cama. Me desesperé al notarlo ¿Acaso se había ido sin despedirse?

Enseguida noté una carta encima de su almohada, era claramente de él.

"Kayn:

Sí estás leyendo esto es porque seguramente acabas de despertar. Antes de irme te ví dormir por un minuto, te veías muy tranquilo, supuse que habías dormido bien y ninguna pesadilla te estaba atormentando. Al observarte me puse a pensar en lo afortunado que era por haberte encontrado aquel día, lleno de barro, tan débil y fuerte al mismo tiempo. Te haz convertido en alguien fundamental en mi vida, la verdad es que odio ponerme sentimental, siento que no va para nada conmigo e incluso estoy algo avergonzado ahora mismo escribiendo esto. Quiero que sepas que pase lo que pase siempre estaré contigo, mi sombra lo estará, así que jamás te sientas solo. Sé que no estuvo bien el que me haya ido de esta forma, sin embargo; si me despedía de ti seguramente no iba a poder aguantar las ganas de llevarte conmigo, pero a nadie le puedo dar tanta confianza como a ti. Siento que en este papel no alcanza ni el mínimo porcentaje de todo lo que quiero decirte, aún así no lo haré más extenso. Te amo Kayn, gracias por ser mi más preciada arma, no sería el mismo si jamás te hubiese conocido. Espero verte muy pronto, cuidate mucho, sé fuerte.

[Hiatus] Mi preciada arma. (Zed x Kayn)Where stories live. Discover now