LA LISTA DE HANNAH✓

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-Se ha ido demasiado pronto.

No la respondo.

Solamente aparco delante del café 24 horas y apago el motor. En silencio, miramos al frente. Todos están dentro, o eso creo, ya que el AUDI, el descapotable y la furgoneta de Nick está.

Tamborileo unos segundos con los dedos encima del volante y giro la cabeza lentamente para ver sus ojos vidriosos.

-Yo ni siquiera conocía de vuestra existencia- suelto para cambiar de tema. Los pocos momentos que he tenido con ésta chica, y ya sé que es sensible de cojones.

-Yo sabía de su hermano. Sabía lo de que se llevaba bien con una rubia de su trabajo y sabía también lo de su amigo Nick. Incluso a veces se pasaba horas hablando de las charlas que tenía contigo y de cómo erais incapaces de estar serias durante dos minutos- me escuecen los ojos y sonrío amargamente- Pero nunca os conocí. Hasta hoy, claro.

Sonríe y le devuelvo la sonrisa.

Decidimos entrar antes de que a la rubia le de algo. Les encontramos sentados en una mesa apartada en el rincón derecho del local. Todo está silencioso y vacío. Cuando nos vamos acercando, puedo examinar sus caras ésta vez mejor con la luz a mi alrededor.

Sus aspectos no me hacen cambiar de opinión, pero el aspecto del hermano de Hannah me deja con la boca abierta. Era de noche, pero tan ciega no podía haber estado como para no darme cuenta de los tatuajes que tenía. Ahora la chaqueta con la capucha echada sobre su cabeza no dejaba ver más que los tatuajes que le subían por el cuello.

Su flequillo oscuro le caía por la frente y cuando notó una mirada sobre él, levantó la suya, haciendo que así chocara con la mía. Retiré la mirada en el instante y me senté junto a Nick. Cam se hizo un hueco un a mi lado y todos nos quedamos callados, en la misma posición.

De brazos cruzados y mirando con los ojos entrecerrados la caja situada en medio de la mesa.

Miro de reojo a Nick y cuando éste siente mi mirada sobre él, se sonroja. Y me parece un gesto tan adorable, que llevo mi mano para acariciarle la mejilla. Se sonroja mas y reimos por lo bajo.

Stacy bufa y Dante solamente rueda los ojos.

-Bueno, la abrimos de una vez o no. No tengo toda la noche- digo con la voz firme.

-No te hagas la chula, si te espera una cama vacía- me pincha Stacy con una mirada fulminante.

Todos se quedan callados y yo paso de contestarle. No quiero que el Karma vaya en contra mía esta noche. Cam hace los honores y quita la tapa.

Nos sorprendemos al encontrar dentro cartas. Pero un pos-it encima de éstas resalta en color amarillo.

''Si estáis leyendo esto, entonces significa que estoy muerta. No es raro preparar algo así sin saber el día en que partirás. ¡No juzguéis! En las siguientes cartas, hay una meta para cada uno de vosotros. Cada uno debe de cumplir con su deber, si queréis que descanse en paz. Recordad, sois las personas más importantes de mi vida. Por eso estáis ahí sentados. Hannahx''

Los vellos de mis brazos se erizan y nos miramos entre nosotros. Quito el pos-it de encima y lo dejo aparte.

Hay 3, pero en el fondo, hay un sobre más gordo. Notamos que en las cartas, hay un nombre diferente.

La primera pone Nick. Éste alarga su mano y la coge. Nota nuestra mirada y lentamente rasga el sobre para coger un simple papel blanco que hay dentro.

-''Me confiaste tu pasión por los puentes. Pero tu temor a ser rechazado te impide triunfar, cariño. Tu misión será inventar tu propio puente  y participar en el concurso de puentes del mes que viene. Tienes un mes. Adelante, confío en ti.''- todos nos quedamos callados, a la espera de que diga algo. Cuando levanta la cabeza, tiene los ojos húmedos- Siempre he diseñado puentes a espaldas de todos, aunque sea mecánico- ríe- Bueno, supongo que no me queda más que aceptar, si con eso descansará en paz.

Sonrío ante lo dulce que es.

Vuelve a meter el papel dentro del sobre y se lo guarda en el bolsillo de la chaqueta. Le llega el turno a Stacy. Ésta lo coge y mirándonos con suficiencia, empieza a leer su papel en voz baja. Pero su cara desencajada y sus facciones sensibles delataban lo mucho que se estaba esforzando por no llorar.

Nos miró a todos y tras suspirar, leyó su papel.

-''Sabes que siempre quise llegar a ser la secretaria personal de una empresa. Hasta ahora, tú y yo solo hemos servido cafés. Pero ahora, supongo que sabrás que no podré llevar a cabo mi meta, pero sé que siempre quisiste tú también llegar a ser secretaria. Tu misión será conseguir ese puesto en un mes. Adelante, confío en ti.''- ninguno habló, y su cara se sonrojó, cuando guardó la carta en su bolso- Acepto- suspiró.

Nick le apretó el hombro y por fin la vi sonreír sinceramente por primera vez.

Fue el turno de Cam. Sus manos temblaban y cuando abrió el sobre y sacó el papel, sus lágrimas cayeron como cascadas. Le apreté su mano libre mientras leía lo que ponía en su papel.

-''Eres una gran escritora. Y aunque ahora estés decidida por estudiar medicina, en el fondo sé que aún te hace sentir melancólica aquel libro que abandonaste al cabo de tres páginas. Tu misión será terminarlo y lograr publicarlo en alguna editorial. Tienes un mes de tiempo. Adelante, confío en tí.''- aprieta los labios y se limpia las lágrimas con el pañuelo que le arroja Nick- Ella me apoyó en lo de ser escritora desde un principio, pero aunque la mentí diciéndole que era algo pasajero, ella nunca se lo creyó- rió amargamente dejando el sobre delante de ella. Nos mira a cada uno antes de sonreír y asentir- Acepto.

Stacy da palmadas y Nick le da un beso en la cabeza a Cam.

Pero yo ni siquiera estaba mirándoles. Ni Dante tampoco. Nuestras vistas estaban fijas en el único sobre que quedaba en la caja. El gran sobre. Pero no porque solo hubiese uno, sino por algo mucho peor. 

Ponía ''DANTE Y GRACE''.

Todos notan lo mismo y como ninguno de los dos lo coge, Nick lo hace. Dentro del gran sobre estaba un libro pequeño. Lo dejó encima de la mesa. Desdobla el papel y lee rápidamente lo que pone dentro.

-''Sé que me estoy ganando el infierno por lo que voy a hacer, pero creo que sois los indicados para hacer la última misión. Vuestra misión es, juntos, cumplir las 50 cosas que anidan en mi lista de las cosas que siempre quise hacer. Algunas las tendréis que hacer con los demás, algunas individualmente y algunas los dos juntos. Cumplir TODAS las cosas. De vosotros depende. Adelante, confío en vosotros.''- se queda con la boca abierta cuando termina. 

No mirábamos a ninguno. Su ojos verdes me miraban a mí, y los míos oscuros le miraban a él. En el poco tiempo que he hablado con él, me ha caído fatal.

Es de esos tipos que se creen que como son guapos tienen la obligación y la capacidad de tratar mal a los otros. Pero no, a mí me va lo dificíl, pero mi hermana siempre me ha aconsejada alejarme de tipos como estos.

Y sigo viva gracias a eso. Pero... ¿Hacer cosas junto a él? ¿Como un compañero y una compañera? Eso acabaría en sangre, seguro. Y lo afirmamos los dos cuando, medio sonriendo, decimos a la misma vez:

-NO.