A Través De Ti [Hidalgos#2] ✔️ [En librerías]

11. 'Hola, Iceberg.'

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No vuelvo a ver a Artemis en días, lo cual no me extraña, a veces trabaja tanto que llega super tarde y se va temprano. Por lo que he oído de su padre es que la compañía ha tenido una semana super ocupada, incluso su madre esta preocupada por su alimentación.

Sofía entra a la cocina el viernes por la mañana, —Necesito que prepares un almuerzo balanceado y se lo lleves a Artemis. André puede llevarte.— André es el chofer de la señora.

Así de saturado esta Artemis que su madre, que nunca se preocupa por nadie, ha decidido ayudarlo de alguna forma. Una parte de mi esta emocionada de verlo, lo he extrañado, tenerlo de nuevo en la casa me ha hecho acostumbrarme a su presencia y ha despertado en mi una nostalgia que no sabia que tenia hasta ahora. Artemis solía ser mi mejor amigo, con él que contaba para todo, extrañaba esa sensación de tener a alguien de manera incondicional en mi vida.

Con mucha dedicación, le preparo su comida favorita y una ensalada de frutas como postre. André me lleva en silencio a la compañía Hidalgo, me alegra haber decido cambiarme la ropa, lo menos que quiero es entrar a la empresa con ese uniforme que parece de Halloween. Creo que ya debería dejar de usarlo, después de todo, él que me hizo ponérmelo fue Artemis.

Cruzo las puertas transparentes, y me maravilla lo cristalino de pisos y lo impecable que luce todo el mundo. Me encuentro en la recepción, una morena de apariencia elegante me recibe con una sonrisa, —¿En qué puedo ayudarte?

—Vine a traerle el almuerzo a...— casi digo su nombre con confianza, —Al señor Hidalgo.

Ella me da una mirada extrañada, —¿A nuestro CEO?

—Si.

—¿Y tú eres...?

—Me llamo Claudia, soy el personal de servicio en la casa Hidalgo.

Ella me mira de pies a cabeza, mis jeans que compré en una venta de garaje la semana pasada no parecen ser suficientes a pesar de que cuando los compré sentí que eran los más bonitos del mundo. Supongo que lo bonito para mi, es basura para otras personas.

—¿Él sabe que vienes, Claudia?— sus ojos aterrizan sobre mi camisa azul de botones que también me pareció super linda en oferta.

—No lo creo, su madre me envió.

Ella vacila, sus ojos siguiendo esa evaluación que me incomoda.

Bien, lo intenté de la forma amable.

—Escucha,— miro la plaquita con su nombre sobre su blazer, —Amanda, llama a quien quieras si tienes dudas sobre mi identidad, el almuerzo del señor se esta enfriando mientras tu pierdes el tiempo juzgandóme por mi apariencia en vez de hacer tu trabajo de forma efectiva.

Ella se queda con la boca abierta así que sigo, —Tu trabajo sería llamar, confirmar mi identidad y dejarme subir, fácil de hacer y así dejamos de perder tiempo.

Amanda hace lo que le digo, al parecer llama a la asistente de Artemis y luego me da un sticker de visitante para poner sobre mi camisa y me deja subir.

La oficina de Artemis esta en el último piso y no me sorprende, a él siempre le han gustado las alturas, me atrevo a decir que debe tener ventanas grandes y amplias en su oficina para mirar al vacío de vez en cuando.

Entro al piso de Artemis y una asistente alta, rellenita de sonrisa dulce me recibe, mucho más amable que Amanda,—¿Claudia?

Asiento, —Si, hola.

—Pase adelante.— me señala un par de puertas dobles a su izquierda.

Toco la puerta, y lo escucho decir 'Adelante'