Capítulo 19 : ¿Otro bebé?

2K 140 0
                                    

Narra Cihangir :
-¡Efne!- Grite al entrar a los aposentos de Bayaceto. -¿Aquí tampóco está?- Pregúnte al ver a mi hermano, qué se encontraba observandome extrañado.

-¿De qué hablas ,Cihangir?- Pregúnto mi hermano confúndido.

-No ví a Efne desde la mañana, hermano.- Le conté.

- Yo la he visto en la mañana, actúaba muy extraño. - Me respondío.

-¡La he búscado por todas partes, y no está!- Gríte . Me volvería loco. -También se comportaba extraño.-

- Hermano, ve a tus aposentos.- Me ordeno amablemente. -Te prometo que búscare a Efne por dónde sea. Mediante Alá , la encontrare.- Prometío.

-Hermano, no puedo ir a mis aposentos así cómo sí nada.- Díje preocúpado. -¿Estas segúro que podras?- Pregúnte.

-Así es, tú necesitas descansar.-

Yo asentí, en verdad estaba exaústo.
Mi cabeza prónto estallara.

3 Meses después...
Narra Efne :

Observaba por la ventana de mis aposentos,sentada en mi sillón, esperando ver a algúno de mis hermanos llegar, qué me venían a búscar, qué salía de está posilga.
Alguién golpeó la puerta, lo que me saco de mis nubes.
Les mandaba muchas cartas a mis hermanos, pero Emir me informaba que el sóldado que las enviaba a palacio, siempre era asaltado.
Sí, soldado. No tenemos mensajero aquí.
-¡A delante!- Exclamé.

-Súltana.- Salúdo Emir.

-Díme Emir. - Díje abúrrida.

-Su hermano Mustafa, respondío su carta. ¡Le ha llegado!- Díjo felíz.

-¿Es en serío ,Emir?- Pregúnte levantandome de mi sillón. -¿Dónde está la carta?- Pregúnte.

-Tomé ,súltana.- Díjo extendiendo su mano, entregandome la carta.

La abrí, y decía lo siguiente :

Querida hermana, estoy extremadamente sorprendido. El súltan habia iniciado una búsquedad, la cúal se llevo a cabo, pero a los 5 meses, se ha encontrado un cuerpo abandonado, por el cúal se  te ha dado por muerta.
Tus hijos, mis sobrinos, están creciendo muy felices júntos. Cihangir, les da mucho amor, pero él se encúentra en un estado de sufrimiento inexplicable.
Hermana dime en dónde estas, necesíto encontrarte.
Bayaceto, jamás ha dejado de búscarte, casi no duerme ni come. Nosotros, tus hermanos, Selin , Bayaceto Mariam y yo , jamás hemos perdido la esperanza de encontrarte.

Lúego se veía cómo la carta se encontraba llena de sangre.

-¿Qué es esto?- Pregúnte. -¿Qué ha súcedido? -

-El sóldado qué envió la carta, púdo ír sín ningún problema, pero al volver, dío hasta su vida por enviar la carta,súltana.- Explicaba. -Él escapó de los que atacan con frecúencia a sus mensajeros.-

-Emir, Sabes ¿Por qué atacan a núrstros guardías?- Pregúnte.

-No,súltana. Pero ya lo averiguare.- Díjo.

-Está bien. Gracias.- Díje. -Puedes retirarte.- Ordene.

Al estar sóla en mis aposentos, ví cómo comenzó a llover.
La verdad qué no puedo creer tódo lo que paso, mis niños ya tendrán un año. Eso me pone felíz, pero a la vez triste, yo no pude estar con ellos en sus primeros meses de vida.

Narra Mústafa :
El día de ayer había recibido una carta de Efne, que contaba lo siguiente :

Querido hermano Mústafa, soy yo, la súltana Efne.
Me encúentro en un palacio oculto en el cúal no puedo salir, estoy aqui a órdenes del súltan.
Solo te envío está carta, para que sepas que sí estoy bien.
Los echo de menos a todos. ¿Cómo se encúentran mis hijos, la súltana  Emeth y el principe Meté? Esperó que mi sobrino Mehmed , Cihangir , tú , y mis hermanos esten en perfecto estado.
Por favor, encúentrenme.

Hoy en la mañana, decidí ir a la cápital a hablar con el súltan y mis hermanos.
La súltana Hürrem, sí estaba preocúpada, mi llegada para ella, será bienvenida.

Tarde unas cúantas horas en llegar a la cápital.
Mi hijo me súplico que lo llevase, ya que quería ver a sus tíos, pero la situación era peligrosa.

Al llegar a palacio, lo primero que hice fue ir a los aposentos de mi hermano Bayaceto.

-¿Hermano?- Pregúnto al verme ingresar allí. -¿Qué haces aquí?-

-Tengo noticias de Efne.- Le informé.

Abrío sus ojos muy grande, y se acerco prestandome muchisima atención.

-Dime qué pasa.- Pidío. -¡Dime que sabes, Mústafa!-

-Efne me ha envíado una carta, informandome qué sí está viva.- Le contaba. -Efne se encúentra en un palacio ocúlto,por órdenes de núestro padre.-

-¡Ya no me cállare más!- Gríto Bayaceto. Salío de sus aposentos enfurecido. De segúro iba a los aposentos del súltan.

Me apresúre en salir, sí él hablaba con el súltan, tendría problemas muy graves.

-Alto.- Díje parando su paso. -Sí le díces al súltan algo, Efne podría tener próblemas.- Le díje. -Debemos seguír en comunicación y encontrarla por núestra cuenta.-

-Está bien.- Asintío.  -La encontraremos por núestra cúenta.-

.

.

.

Unos días después ...
Narra Efne:
Estaba en el establo, observando los cáballos, de prónto sentí un dolor en mi panza.

-¡Ay!- Grité cayendo al súelo.

-¡Súltana!- Exclamó Emir, que se encontraba a mi lado. -Súltana debo llevarla a sus aposentos.- Díjo preocupado.

Asi él lo hizo, me llevo a mis aposentos, a dónde llamó a la dóctora.

A los minútos que la súltana me revisara, me informó lo que tenía.

-¡Oh súltana!- Exclamó con una sonrisa inmensa.

-Digame, Señorita.- Díje sería.

-¡Ústed está embarazada! - Díjo felíz.

La sultana Efne ||Where stories live. Discover now