Capítulo 34 : El destino de Selin, en manos del sultán.

1.2K 91 0
                                    

Narra Súltana Efne :

Mí hermano Selin, confeso qué intentó asesinar a mis hermanos. ¿Cómo pudo haber hecho eso?

Miré a mí madre, y ella estaba con sus manos extendidas en la boca, sín dúda no lo podía creer. -Aunque le hubiese gustado qué Mustafá este muerto-.

Mariam, lloraba de la angustía, y sí, Selin resúlto ser un extraño para está familia.

-¿Ahóra ves madre quién es en verdad Selin? Tú elegiste a su esposa, la qué arruino aún más a mi hermano. Ella es otra responsable de esto.

Mí mamá se estaba poniendo muy mal en verdad.

-Mamá, vamos a tus aposentos, necesitas descansar.- Díje viendo a Mariam para que me ayúde .

Llamamos a un guardía para que llevará a núestra madre a descansar, y esté a si lo hízo.

-Por alá, Efne qué bueno que estabas ahí.- Me díjo Mariam.

-No es nada que yo hice, ahóra debemos esperar a qué Hürrem descanse. - Le díje a mí hermana.

-No puedo creer qué Selin intentara matarnos. Mustafá, ní Bayaceto y mucho menos yo, le hicimos algo qué lo daño tanto cómo para qué piense en matarnos.- Mariam se desconsoló totalmente.

-Hermana, nada malo nos va a pasar, no a nosotros, ní a nadie. Cuentas conmigo, hermana.- Díje abrazandola.

.

.

.

Narra sultán Suleyman :

Un guardía me aviso que Bayaceto y Selin me esperan, no tenía las energias cómo para agúantar a dos hermanos discutiendo cómo si fueron el enemigo.

Al entrar a los aposentos de Selin, ví que tódo era un alboroto.

Mariam estaba desconsolada, llena de lágrimas, y Efne la consolaba,  trataba de calmarla pero eso era algo imposible.

Rustem estaba esperando cerca de la puerta, segúro que a mí.

Mustafá y Bayaceto estaban sosteniendo violentamente a su hermano Selin.

Algo malo había ourrido sin dúda.

-¿¡Qué es lo qué está pasando!?- Pregúnte, haciendo notar mí enojo.

-Padre, Selin tiene algo qué confesarte.- Me advirtío Mariam, enfadada.

-¿Qué es lo que tienes que decirme,Selin?- Pregúnte.

Selin desviaba la mirada, notaba sudor en su rostro.

-¡Dilé a núestro padre qué intentaste hacer, Selin!- Gríto enfurecido Bayaceto.

-Selin, no lo compliques ¡Andá!- Gritó Mustafá.

-¿Debo hacer lo qué hice ante núestra madre para qué digas lo qué has hecho, Selin?- Pregúnto Bayaceto.

-¡Selin! Habla ya. - Órdene.

-Intenté...- Dío un súspiro. -Intenté matar a mis hermanos.- Confesó con mucho miedo, se lo notaba en sus ojos, y en su voz.

-Dilé a núestro padre, qué no sólo me querías matar a mí, sí no a Mustafá, y también a Mariam.- Aportó Bayaceto.

-Intente matar a Mariam, a Bayaceto y a Mustafá. -

-¿Te das cúenta de lo qué hiciste, Selin? ¡Ellos son tus hermanos! ¡Tu padre, el padre de la gente qué intentaste asesinar, es el poderoso sultán Suleyman. - Díje enfurecido.

-¿Cómo lo descubrieron?- Pregúnto Mariam.

-Estaba entrando a los aposentos de Selin, para despedirme, ya qué mañana vuelvo a mí provincia. Y escúche cómo le daba las ordenes a un guardía de qué nos maté a nosotros tres, y que lúego se encargaría de Efne y Cihangir por su misma cúenta, tomando a sus sobrinos cómo rehenes.- Respondío Mustafá.

-Selin, ¡vén conmigo de inmediato!- Órdene salíendo de mis aposentos.

-Aunque, eso no fue tódo.- Múrmuro Mustafá.

-¡Habla, hijo!- Le órdene a Mústafa.

-Hablaba de qué lúego de un tiempo, lo... Lo matarían a ústed, para ascender al trono de una buena vez.-

Selin, no merecía el cargo qué tiene.
Selin ,ya no merece ser mi hijo.
Selin, ya no merece la vida.

Ahóra, tomaré la desición correcta respecto a ese bastardo, sín tomar en cúenta qué es mi hijo.

La sultana Efne ||Where stories live. Discover now