🍭⭐Capítulo 6: La reunión familiar ⭐🍭

927 132 34
                                    

Momo se encontraba en las gradas del polideportivo comiendo un trozo de jokbal mientras que miraba el entrenamiento de las animadoras. Nayeon la había obligado a esperarla allí para jugar al tenis nada más salir.

El jueves no pudieron quedar porque la japonesa debía estudiar para su examen de recuperación de un parcial de matemáticas, así que Nayeon le dio vía libre a cambio de practicar al día siguiente. Momo no dudó en aceptar.

La coreana quería ganar a sus primas e iba a asegurarse de que lo hacían, por eso necesitaba quedar con Momo antes del sábado.

Era viernes, así que era el último entrenamiento antes del partido de fútbol del domingo contra uno de los grandes rivales del instituto, y se notaba. Sobre todo en la actitud de Nayeon.

Actuaba peor de lo que lo hacía normalmente. Y por si el ambiente no era lo suficientemente tenso, en cuanto se pasaba descargando su furia contra sus subordinadas Jihyo y Jeongyeon salían en defensa de la pobre chica con la mala suerte, enfadando todavía más a la capitana. Momo no disfrutaba viendo a sus dos amigas pelearse con la reina, le partía el corazón ver su amistad destruida.

Tras terminar de cambiarse, Jihyo y Jeongyeon fueron a donde estaba Momo para saludarla y preguntarla porque había ido a verlas.

— Es que he quedado con Im Nayeon — respondió la japonesa, avergonzada.

— ¿Para? — preguntó la de pelo corto con desaprobación.

— Somos pareja en el torneo de Liu — se excusó.

Las otras dos suspiraron aliviadas. Lo peor que podía pasarle a su nueva amiga era juntarse con la coreana.

— ¿Qué llevarás mañana a la casa de Sana-ssi? — preguntó Jihyo para cambiar de tema.

Momo las miró como si la estuvieran preguntando si quería ir con ellas a la luna.

— Mañana hemos quedado las cinco en su casa — le aclaró la menor.

El gesto de la japonesa no cambió ni un milímetro, seguía igual de confundida.

— Estuvimos hablándolo por el grupo ayer — acotó la de pelo corto, exasperada.

La cara de Momo cambió a una expresión incómoda. No sabía como decirles que no podía ir sin mencionar que ya había quedado con la familia de Nayeon.

— ¿Pasa algo? — preguntó las más baja.

— El jueves no pude leer los mensajes porque estuve estudiando y... tampoco creo que pueda ir mañana. Lo siento.

— ¿Por qué? — preguntó Jihyo haciendo un puchero.

— Pues...

— ¡Subcapitanas Park y Yoo! — gritó una de las animadoras e interrumpiendo a Momo.

Las coreanas se miraron entre sí. La chica que las había llamado parecía querer comunicarles algo importante, así que se despidieron de Momo, no sin antes desearla suerte en su entrenamiento con la mayor.

Nayeon fue la última en salir, cuando lo hizo vio a la menor tumbada en una de las gradas durmiendo plácidamente. Se acercó a ella para despertarla, y sin querer, se quedó varios segundos observando su expresión al dormir. Entonces recordó lo que su ama de llaves le había comentado, tenía razón. Momo era dulce, seguramente fuese la persona más dulce que conocía.

De pronto, Momo comenzó a roncar y provocó que Nayeon se diese un susto enorme.

— Despierta Mono — dijo la mayor zarandeándola.

The Queen (Namo / Monayeon) Where stories live. Discover now