Epílogo

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Un pequeño epílogo para ustedes. <3

El sol hacia que las finas cadenas de oro que envolvían el cuerpo de Louis brillaran. Y las manos de Harry no podían dejar de trazar esas cadenas. El pecho, la espalda y finalmente su pierna derecha. Su guardiana tampoco podía dejar de moverse entre las piernas del omega, sacando su lengua para saborear la piel exquisita y sensible de los muslos. Los ojos de Harry seguían todo lo que hacía, pero un gruñido no se ocultó cuando Louis soltó un pequeño jadeo al sentir una caricia cerca de su virilidad.

"Creo que estoy celoso."

Louis arqueó su espalda, las cadenas se movieron acariciándolo también, y una sonrisa atrevida se posó en su rostro.
"Creo que deberías estarlo."
El gruñido del alfa hizo parar a la serpiente y puede ser que al guardián de la esquina lo sobresaltara. Pero nadie debía saberlo.

Harry tomó al animal y lo puso en el suelo. Volvió a trazar las cadenas.
El omega dejó ver sus ojos con una sonrisa en su rostro.

"Me haces cosquillas."

El alfa se arrodilló a su lado.

"Lo sé."

La sonrisa del omega se extendió mucho más y estiró los dedos para enterrarlos en el cabello del alfa. Harry se inclinó a su toque, manteniendo sus ojos fijos en las facciones de Louis, adorando como esos zafiros eran resaltados por las delgadas líneas pintadas de color negro en sus párpados.

"¿Dónde está Asim?" preguntó Louis levantándose del largo sillón.

Harry se puso de pie y con un gruñido advirtió al guardián de la esquina que no mirara la desnudez de su omega.

"Fue al jardín para traerte tu loto como todos los días. Creo que deberías taparte, por más que me guste que solo vistas oro no soporto la idea de que alguien más te aprecie." Gruñó.

Louis miró a su alfa de manera divertida antes de dirigirse a los pies de la silla y recoger la bata azul y deslizarla por sus hombros. Harry logró atrapar sus manos antes que pudiera atar el cordón.

"Yo lo hago." Murmuró.

Louis se dejó hacer y cuando escuchó las puertas siendo abiertas se alejó de Harry para poder alzar a su cachorro. Un varón con un dulce aroma, un pequeño omega.
Su pequeño omega.

Louis como todas mañanas ladeó su cabeza y dejó que su hijo le pusiera la flor en sus cabellos. Harry atrajo a Louis con una mano y con la otra acarició el cabello castaño del pequeño omega. El faraón y el rey sonrieron para su príncipe.

Cuando Asim cumplió los tres años su perfume natural apareció y Harry al instante supo que su hijo sería un omega, con toda la felicidad y la fascinación cargó a Louis en sus brazos y lo besó profundamente, dejando al omega abochornado y sin aire. Louis le preguntó de su felicidad y el alfa afirmó orgullosamente que su cachorro sería un omega al igual que él. Y fue el turno de Louis para besar los labios de su alfa.
"Ve con tu tía Gemma, quiero pasar tiempo con tu madre." Dijo Harry. "Te prometo que después será todo tuyo."

Asim asintió con la cabeza y a cada uno les regaló un beso en la frente para después salir de los aposentos.

"¿Dónde quieres ir caminar?" preguntó el alfa. "el día está agradable."

Louis se volteó a verlo divertido con una ceja levantada.

"Recuerda la promesa que me hiciste anoche."

Harry se acercó.

"Tu regalo." Murmuró. "Lo recuerdo, pero tenía pensado dártelo más tarde."
"Pero yo lo quiero ahora, Alfa." Exigió con una sonrisa. "Ahora."

"Tendré que vendarte los ojos." Harry fue hasta una de las mesas y de un jarrón sacó una tela negra y una rosa, se posicionó detrás de Louis y tapó su ojos con la fina seda. "Toma mi mano y estarás bien."

El omega encontró la mano que el alfa le ofrecía con un leve sonrojo en sus mejillas. Después de poco tiempo supo que estaban en el jardín cuando sus pies sintieron la pierda caliente, apretando la mano que lo guiaba sonrió muy complacido cuando se detuvieron, la curiosidad lo estaba rodeando.
Suspiró.

"Lo he mandado a hacer para ti cuando te marqué, eres el rey de Egipto; mi rey, y representas a la unión de dos tierras sagradas," empezó Harry dejando su mano para posicionarse detrás y lentamente sacar la seda negra de su ojos, "Siendo un ser divino, una rencarnación de uno de nuestros dioses; necesitas una protección, un aliado fiel para que te guie. Mi guardián Anubis me ha hablado en un sueño, y me dijo que esta mujer debía ser su guardiana."

Cuando la tela cayó, Louis pudo ver una mujer hecha de oro puro, un poco más grande que él. Con el rostro serio pero con un toque de sensualidad. Su cabello suelto llegando hasta sus caderas, mientras su cabeza era rodeada por una corona que jamás había visto; era una fusión. Dos cuernos altos se alzaban con orgullo, protegiendo un sol entre ellos, y al lado de los orejas de un animal que no recordaba en nombre. Los dedos delgados del omega acariciaron el fino rostro de la mujer con gran fascinación.
El faraón rodeó su cintura.

"El nombre de esta diosa es Hathor, esta señora permite que los muertos y el sol se encuentren para guiaros en el mundo interior. Pero ella también es la diosa de la música y de la alegría, de los omegas y del amor. "Las palabras del alfa fueron susurradas. "Protegen a los alfas buenos y a los cachorros. Creo que mi Anubis no se equivocó."

"Shakar." Balbuceó, sus ojos dejaron a la mujer y observaron los ojos dorados de Harry, agarró su rostro con ambas manos y lo hizo inclinarse para que se dieran un largo beso. "Es hermosa, Harry."

"No tanto como tú. Tú eres más hermoso, Louis."

El calor azotó el rostro del omega cuando agachó la cabeza. El alfa tocó su mentón.

"¿Lo sabes, verdad? Eres hermoso, dime que lo sabes."

Las arrugas alrededor de los ojos de Louis le dijeron a Harry su omega estaba sonriendo. Poco a poco lo hizo levantar el rostro, su pulgar delineó la boca ajena.

"Lo sé, Harry." Susurró el omega con una mirada llena de afecto. Enredó sus dedos en la cabellera corta de su alfa. "Tú me haces creerlo."

Harry le acarició el brazo izquierdo con la rosa, poniendo un silencioso significado cuando los pétalos de la rosa tocaron la daga tatuada en la piel de Louis. Ambos se miraron a los ojos. El reciente verde y el profundo azul serían los únicos testigos del verdadero amor que había y habrá entre ellos en otra vida.

Tal vez leyendas serían escritas sobre un alfa y un omega con nombres pero sin rostros que lograron enamorarse a pesar de los malos deseos de personas sin corazón. Tal vez esas leyendas tratarán de un alfa príncipe solitario que no encontraba el amor y de un omega simple que no quería saber nada de amor.

O tal vez de solo un Louis y un Harry que lograron que sus almas se volvieran una.






Hablemos de la historia en mi Instagram que allá contesto más rápido :) [@/yoondka] Hablemos del segundo libro jamás terminado hahahah

Awmygha [Omega] Where stories live. Discover now