Capítulo Siete

93.2K 6.7K 752
                                    

—Estoy empezando a pensar que el profesor Grullón está enamorado de ti.

Desde mi reflejo en el espejo del baño, miro escandalizada a Frida. —¿Por qué dices algo tan absurdo?

—Porque me parece sospechoso —ella sonríe con complicidad—. Ya te has quedado a solas con el profe en dos ocasiones y porque él mismo lo ha ordenado. Además, eres hermosa. Tienes una belleza etérea, única y esa mirada inocente, no deja indiferente a ningún hombre, querida. La verdad es que te envidio —confiesa y la miro con la boca abierta—. Sin esforzarte luces espectacular.

—Gracias —sonrojada agradezco con humildad el cumplido—, pero te equivocas. Lo único que el profe siente por mí es molestia por desafiarlo y no hacer las cosas a su modo. Ya sabes como es.

—Lo sé muy bien —suspira de forma teatral—. Llevo estudiando sus gestos, su manera de hablar y fantaseando con su formidable cuerpo desde el primer día de clases. Es en exceso atractivo, ¿a que sí?

Me encojo de hombros. —Lo es.

—¿Y lo dices así tan secamente? Evenin, cariño, necesitas pasión en tu vida —hace gestos dramáticos con sus manos.

Niego con mi cabeza. —En estos momentos lo que necesito es graduarme de la preparatoria y estamos a un paso de hacerlo. No hay tiempo para romances absurdos profesor-estudiante.

Ella me mira pensativa. —Mmm, ¿qué harías si nuestro guapísimo y caliente profesor Grullón te deseara en secreto?

Logro disimular la tensión que su pregunta me provocó porque él sí lo hace, y yo soy la única que conozco ese secreto.

Con calma engañosa, guardo la barra de labios en mi bolso, y la miro de frente. —Está loca, Frida. ¿Lo sabías?

Ella dice riendo: —¡Es algo hipotético, chica! Y mira que lo he pensado miles de veces, ¿y sabes que haría yo si lo supiera?

—¿Qué cosa? —no niego que me interesa su respuesta.

—Pues obvio que hacer de ese secreto algo real y actuar sin dudarlo. Nos veríamos fuera del horario escolar y daríamos rienda suelta a la lujuria y al deseo que sentimos el uno por el otro. ¡Ardería Troya, mi amiga!

—¿De verdad tendrías la aventura con el profesor?

—¡Pues claro! —exclama con verdadero entusiasmo—. Y no con cualquier profesor, solo con Sebastián Andrés Grullón. ¡Hasta su nombre destila sexo en cada sílaba! Y no solo su nombre, cada centímetro de su fuerte cuerpo exuda y promete interminables noches de pasión. Es el hombre perfecto que cualquier mujer con sus cinco sentidos bien puestos desearía tener en su cama y en su vida —murmura en tono meloso.

Y me sorprende darme cuenta...de que eso es cierto. Oh, no

—La vida es solo una, Evenin —me aconseja mientras retoca su maquillaje—. Y que un hombre como él esté interesado en ti, es una oportunidad increíble que no puedes dejar pasar porque te arrepentirás el resto de tu vida. Y además, está soltero y nosotras somos mayores de edad. ¿A quién diablos le importa?

Oh, no. No puede ser posible que estoy dudando de lo que siempre he pensado sobre el profesor Grullón desde el día uno cuando lo vi entrar al aula. Pero desde que él me confesó: "Llevo casi diez meses conociéndote y notándote, Evenin", no he sido la misma por más que he tratado de olvidarlo y de actuar con indiferencia. Porque me dejó atónita el saberlo. Y no supe cómo lidiar con esos sentimientos...que ya no puedo negarlos ni contenerlos. Frida, sin saberlo, me acaba de dar una bofetada mental, y ahora veo, pienso, y siento cosas que no quería, porque ahora sé que solo han estado dormidas y escondidas bajo la alfombra. Porque desde el primer día de clases, cuando el profesor de Álgebra se adentró en el salón con ese porte, con esa vestimenta ejecutiva, con ese aire de autoridad y exudado su masculinidad sin reservas, no pude apartar la mirada...y lo deseé para mí. Nunca me había gustado tanto un hombre...hasta él. Pero entonces abrió la boca, y con su arrogancia y prepotencia, lo jodió todo. Y entonces en vez de admirarlo y verlo con ojos brillantes como una tonta y como todas mis compañeras, yo lo odié, lo desdeñé por casi diez meses.

Profesor Grullón (Editando)Where stories live. Discover now