In troubles → cake hoodings.

nueve ♔

{a/n: por si creían que las barbas eran el mayor problema...}.

La mañana siguiente, cuando los chicos despertaron, fueron a Target a comprar un poco de comida y cosas básicas. Definitivamente no se esperaban ésa... extraña sorpresa.

Miles de flashes contra sus rostros, miles de preguntas siendo disparadas al aire. La mayoría dirigidas a Calum y a Luke. "¿Es cierto que ustedes dos son pareja?" "¿Cuánto tiempo han estado juntos?" "¿Nos darían otra foto de ustedes?" "¿Por qué no habían dicho nada a sus fans?"

— No somos una pareja -contestó, de malhumor, Luke, ajustando su gorro sobre su cabeza para cubrir sus ojos.

Subieron a la camioneta negra y cerraron la puerta un poco más fuerte de lo que habían querido.

— Oops -dijo Luke, mordiendo su labio y mirando con los ojos bien abiertos hacia afuera.

10 minutos después...

— ¡ASHTON TE AMO!

— ¿LUKE FIRMARÍAS MIS PECHOS?

— ¡AHHHHHHHHHHHHHHH!

— LOS AMO CHICOS SON MI VIDA.

— CALUM POR QUÉ NO ADMITES QUE ERES ASIÁTICO.

— ¡No soy asiático!

— DON'T STAAAAAPH DOIN' WHATCHA DOIIIIIIN'.

Esas eran algunas de las cosas que gritaba la 5SOSFam, acompañado de algo que yo llamaría lenguaje explícito, por lo que no lo pondré aquí.

Entraron a Target; con el cabello despeinado, las prendas algo fuera de lugar... Pero salvos al final de todo.

— ¿Por qué seguimos cometiendo el error de decirles a las fans a dónde iremos? -preguntó Ashton, pasando una de su mano por su cabello rizado.

— ¿Seguimos? ¿POR QUÉ EL PLURAL? ¡Fue tu culpa nuevamente! -regañó Calum. {a/n: flashback al capítulo cinco, awñ}.

— Es su culpa por dejarme usar el celular -se cruzó de brazos, Ashton, frunciendo el ceño y poniendo todo su peso en una de sus piernas.

— ¿Nuestra-? Pero- Tú... Ugh.

Y con ésas palabras sin ningún sentido, pero que contenían mucha rabia, Calum fue al pasillo de la comida, siendo seguido por Luke.

— Tú sabes cómo hacer enfadar a Calum...

— Lo sé, soy lo mejor.

Después de haber seleccionado todas las cosas que querían, y haberlas puesto en el carrito rojo, estaban en la caja registradora, pagando todo.

— Ashton, no necesitabas más bandanas...

— ¡Tú tampoco necesitabas ese peluche de pingüino!

— ¡No te metas con mi pingüino!

— ¿Alguien pagará toda la basura que compraron o llamo a seguridad? -preguntó la chica malhumorada, que parecía llamarse Olivia.

— Oh, claro, lo siento -musitó Ashton.

Lo que Ashton no sabía era que toda ésa "basura" era para la sorpresa que planeaban.

Días después...

Seis de Julio de 2014, 19:27 p.m. Unas horas antes del cumpleaños de un chico de cabello rizado y ojos entre color verde y color miel que responde al nombre de Ashton Irwin.