Pretty Little 《Joerick》Terminada

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Arqueo la espalda. Los nudillos de Joel se pusieron blancos debido a la fuerza que ejercía en su agarre en las rodillas de Erick.

El tonificado cuerpo de Joel se aporreó contra el delgado cuerpo de Erick. Su glande rozó la apretada y rosada entrada del menor quien gimió en repuesta.

Erick contuvo la respiración ante los jugueteos de el pene de Joel, sus manos se entrelazaron y apretaron contra el colchón. Los labios de Joel besaron descaradamente su cuello, chupo y mordió todo su largo. Erick apretaba sus uñas en las manos de Joel, Se retorcía ante sus movimientos, hasta que no pudo más y lo besó, frotó su lengua pero bajo la intensidad de sus movimientos esperando a que Joel lo aleje, lo que no paso sino al contrario este le siguió el beso devorandolo vivamente. Joel le mordió el labio inferior, frotaban sus lenguas de una forma muy salvaje, en gemidos agudos se escaparon de Erick, cuando ingreso de golpe en él.

Joel gruño en su boca, y embistió sin esperar a que se acostumbre o relaje, embistió y embistió, jadeante Erick se alejo del beso para morder su hombro, Joel lo empujó con la cabeza buscando sus labios de nuevo. Ese beso no decía nada, no le transmitía a Erick ningún sentimiento más que placer carnal, un placer muy asqueroso pero excitante. Se alejaron.

- Más...- gimió.

-Eres tan insaciable, puta. -gruño en su oreja.

- No me llames así...ah...soy un hombre.

- Un hombre que le gusta que le den por el culo.

- Si...mm...y sigo siendo hombre.

Volvió a gruñir cuando las paredes de Erick apretaron sus pene, solto una de sus manos y la llevó a la erección del menor, empezó a masturbarlo al ritmo de sus embestidas. Los talones de Erick masajeban los muslos del mayor mientras apretaba aun más sus piernas a la cintura del mayor. Ambos gemían. La cama rechinaba con sus movimientos.

Hasta que Erick se corrió en la mano de Joel, este aun embistiendolo llevo su mano a los labios del menor y embarro estos con su misma esencia y los beso. Erick gimió al probarse, aun frotando sus lenguas y meneando sus caderas en busca de más del pene de Joel. Solo bastó unas tres embestidas más para correrse dentro del menor.

- Estás limpio ¿verdad? - pregunto frío aun dentro dentro la menor.

- Si - imitó su tono de voz, aunque se moría por un segundo orgasmo.