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Erick se quedó dormido con la cabeza aún reposando en las piernas de Joel, mientras este le acariciaba el cabello. Alzaba un mechón y lo soltaba, era muy sedoso.
Aún había algo que quería hacer con Erick a pesar de que eran las dos de la madrugada.

- Erick. -Acercó sus labios a la ruborizada mejilla del ojiverde, plantó un beso y volvió a musitar. -Erick.

Joel lo iba a besar de nuevo en la mejilla pero Erick aun dormido giro su cabeza y sus labios se encontraron. Erick se despertó, sonrió achinando los ojitos y tomó las mejillas del mayor. Sus labios estaban unidos superficialmente, sus labios encajaban tan bien, tan dulce, tan verdadero. Tal vez ya estaban rompiendo todas la reglas pero que más daba mientras sus labios están unidos.

Se alejaron y la luna le daba un brillo singular a los ojos verdes de Erick. Joel suspiro mirándolo y sin poder evitarlo sonrió, sonrió como estúpido mirando sus ojitos, sus mejillas siempre tan rojitas, su sonrisa, su cabello, su todo.

- Quiero ir a la playa contigo. -No podía dejar de mirarlo. Contuvo una risa al ver su rostro con una expresión desencajada, su mirada se desvío unos segundos luego lo volvió a mirar con los ojos entrecerrados pero con una juguetona sonrisa en el rostro.

- Son las, -miró el cielo- más o menos son la una de la mañana y tu quieres ir a la playa ¿no?

-Aja. -asintió aun encantado con el brillo de sus ojos.

- Bien, vamos. -se incorporó de un salto. Lo vio acomodar su ropa y tenderle la mano. Río por lo lindo que se veía, el era adorable sin ser estúpido.

- ¿Le gustaría pararse Señor Pimentel? -le dio gracia el tono que uso.

Sonrió también y acepto su mano gustoso. Ambos caminaron hasta donde dejaron el auto. Erick parecía ya no tener sueño ya que se iba cantando y bailando las canciones que sonaban en la radio. En la vida había sonreído tanto, pero con Erick era inevitable no hacerlo.

- Abre la cajuela. -le dijo interrumpiendolo, recibió un quejido pero hizo lo que le dijo -como siempre tan obediente, eso sin querer excitaba a Joel-.

Erick ahogo un grito de emoción cuando descubrió 5 discos, los 5 álbumes de 1D.

- Si no estuvieras manejando ya te hubiera abrazado. -le dijo aun sorprendido por el regalo. - Gracias Joel, muchas gracias.

- No es nada lobita. -le bromeó.

Erick volvió a guardar los discos, con sumo cuidado, su sonrisa sin querer se había irradiado más. Se acomodo en el asiento para poder ver mejor a Joel.

- ¿Algun día lo superarás?

- ¿Superar qué? 

- Lo del acontecimiento Lobita.

Iba a responderle pero ya habían llegado.

Detuvo el carro en el parking y se bajo rápido para abrirle la puerta a Erick. Este le dio un codazo.

- No te pases de educado, me gustan informales. -le guiño.

Sin darle tiempo a respuestas Erick corrió al agua. Joel termino de cerrar la puerta y colocó la alarma solo para ir corriendo tras Erick.

Lo vio detenido justo en la orilla, así que, lo cargo al estilo nupcial.

- ¿En que momento confundimos las cosas? -le pregunto rodeándole el cuello con sus brazos acomodándose en los de él.

- No lo se, pero ya no quiero que te vayas.

- Joel.

- Erick, antes de ti jamás pensé que me gustaría ver sonreír a alguien, o que me gustaría que alguien me obedeciera, me excita que me obedezcas. Me gustan tus mejillas rojas, tu cabello, tu sonrisa, Erick tu sonrisa me hace muy feliz. Hace mucho no sonreía. Me gusta tu olor, me gusta como te acomodas en mi pecho luego de hacerlo y me gusta como me besas, los labios no tienes sabor ¿Por qué los tuyos me saben a fresa? Te quiero para mi. Me gusta como bailas, y se que serás el mejor, me gusta como cantas todas la canciones como si fuera a ser la última vez que cantas. Joder. Jamás había bailado con alguien y contigo hice una coreografía. ¿Ves lo que me haces? Te pedí respetar las reglas pero mira, ya las rompí yo y quiero saber si también las has roto tú.

- Joel, yo también quiero quedarme contigo. Trate de fingir que no sentía algo por ti pero vamos, me empezaste a tratarme tan lindo y esperar a que no me gustes iba a ser muy cruel de tu parte. Ibas a ser un reverendo hijo de puta si pedías que no me gustes luego de despertarme con besos. Te quiero mucho Joel. Amo tu sonrisa cuando me miras al despertar, tus manos cuando me tocan, tus ojos al mirarme, tus rizos tan tontos pero lindos.

- Quiero cogerte ahora mismo. Quiero hacerte mío en esta playa. En esta estúpida arena y con la vista del mar.

- Pues. -se acercó a su oído y le jalo el lóbulo con los dientes- Yo quiero que me cogas en esta playa, sobre esta estúpida arena y con la vista del mar.

Joel lo besó, lo besó duro, sus lenguas se frotaban y Erick hizo fuerza en sus brazos enredados en el cuello de Joel y logró hacer que sus piernas se enrollaran en la cintura de Joel. Sus erecciones se tocaron y Erick gimió plantando las uñas en la nuca del rizado. Joel  ahueco las manos y las puso en el trasero de Erick, este lo enpino para sentir aun más sus manos...






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Dedicación para Persseffone

Amores, se que mi dedicación puede no ser muy importante pero la que la quiero solo dígame lo.
Y mil gracias por las 700 personitas que me siguen y todo el amor que le dan a esta historia. Las amo.

Pretty  Little  《Joerick》TerminadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora