ᴅᴀʀᴋɴᴇss ✨ p.jimin • p.chaeyoung

p a r k • r o s é

Nombre: Park Chaeyoung/Park Rosé
Edad: 20 años
Magia: Blanca.

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Park Chaeyoung nació y creció en Seúl como hija única de un matrimonio mortal.

En realidad la joven Park no comprendía como ella poseía aquel poder.

Aún cuando había nacido en Seúl su familia se mudó al extranjero donde creció hasta que llegó a la mayoría de edad. Poco después de aquello, durante un viaje familiar en auto; la tragedia alcanzó a Chaeyoung.

Un parpadeo, el sonido de neumáticos derrapando, y todo se volvió negro.

Para cuando la joven despertó en una cama de hospital, todo ya había ocurrido. Los doctores sólo pudieron darle el crédito a Dios, ya que parecía un milagro que esa chica siguiera con vida después de aquel accidente.

Pero un milagro suele ser sólo para algunos.

Chaeyoung perdió a sus padres debido a un conductor que intentaba escapar al haber robado un auto. Y ella había sido la única sobreviviente.

La custodia de la joven Park pasó a manos de su tía, hermana de su padre. Una mujer que se encargó de hacer sentir culpable por aquel milagro a Chaeyoung cada día por los siguientes meses.

Fue entonces cuando comenzó a sentirse diferente, como si estuviera en el sitio equivocado.

Poco después comenzó a experimentar sucesos extraños, mismos que siempre parecían perseguirla aún en la escuela u otros lugares. Ventanas que se rompían, flores que crecían descomunalmente cuando ella pasaba demasiado tiempo en un solo lugar, incluso ciertas noches donde las luces parecían no querer apagarse.

Aquellos incidentes sólo hacían que el trato en casa de su tía empeorara, gritos e insultos volaban a través de las paredes mientras Chaeyoung sólo intentaba soportarlo. No fue hasta una noche, cuando su propio tío intentó abusar de ella que decidió escapar de aquella casa.

Estaba completamente sola.

Esa noche huyo hasta una zona de construcción, donde se vio obligada a esconderse entre sacos de arena y una lluvia intensa. El cielo lloraba junto a la joven Rosé, mientras ella se preguntaba la razón para su propio sufrimiento.

Fue tanto su sufrimiento que el poder que poseía se vio sellado dentro de su propio corazón, que parecía hacerse de piedra con el paso del tiempo. Tanto así que Chaeyoung se vio en el límite de todo, justo en ese pequeños precipicios que nos seduce con un consuelo eterno.

Chaeyoung intentó suicidarse.

Oculta en un callejón sollozando mientras su mano temblorosa sostenía el oxidado metal de lo que parecía una vieja navaja. Sería rápido, la sangre se llevaría sus problemas y el dolor sería momentáneo.

Pero Jisoo llegó a tiempo.

Fue en un abrir y cerrar de ojos cuando Chaeyoung se encontró entre los brazos de Jisoo mientras las lágrimas salían sin control. Cada lágrima acumulada durante su calvario personal se liberó mientras la joven pelinegra susurraba palabras de consuelo, hasta que Jisoo se dio cuenta de que Chaeyoung no era una mortal.

La joven Park nunca notó como su propio poder la sano, evitando que sus heridas se llevaran su vida lentamente.

Chaeyoung tenía el poder de sanar.

Ella poseía un don extraño y precioso, increíblemente poderoso pero muy difícil de controlar.

Jisoo acogió a Chaeyoung, pero está a cambio decidió que dejaría atrás aquel dolor y esos recuerdos amargos.

Jisoo le dio un nuevo nombre, en honor a la forma en que sus poderes parecían destinados a hacer florecer la vida en cualquier lugar.

A partir de ese momento Rosé nació como una nueva persona, y Chaeyoung desapareció como si hubiera sido una pesadilla.

Algunos misterios murieron junto a ese nombre, pero lo que nadie sabe sobre el pasado es que este no puede morir. El pasado espera, escondido entre las sombras de nuestra mente; aguardando para salir a la luz cuando menos lo esperes.

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Si, esto es muy trágico.
Si, esto es sólo el comienzo.
Y si, aún no he terminado de jugar con sus mentes.

Y obvio, los amo.

Acepto dudas y preguntas.
Disculpen cualquier error.

Sofi💕