Un Real Desastre ||Larry||

Parte Dos

Después de haber tomado una siesta, Harry, volvió a sentir náuseas y salió corriendo al baño. Después de haber vaciado todo su desayuno al inodoro decidió lavarse la boca, salir en busca de su mejor amigo y mano derecha; Zayn.

Se vistió algo informal, y lo más informal que tiene es un pantalón junto a una camisa suelta.

Mientras caminaba por el corredor, toda persona que pasaba lo saludaba y él se lo devolvía con una sonrisa. 

Cuando llegó a la habitación que compartía, Zayn, con su esposo, tocó la puerta. La puerta se abrió revelando a Liam, quien le sonrió.

—Buenos días, Majestad—Harry lo observó divertido, porque solo cuando estaban en alguna cena de gala, de estado, o algún acontecimiento importante se dirigía a su persona de esa forma—¿A qué se debe el honor de su visita?— mientras le daba permiso para entrar.

De todas maneras le sonrió:— Buen día Liam, ¿se encuentra Zayn?— preguntó.

—Sí, pero, él está un poco indispuesto.

—Oh! Bueno entonces puedo quedarme con él un momento. De todas formas no puedo hacer nada más— Liam asintió y salió de la habitación sin antes ir y despedirse con un beso de Zayn. Mientras le susurró un “te amo” y un “nos vemos más tarde” Así saliendo de la habitación.

—¿Harry?— escuchó la voz de su amigo.

Se dio la vuelta, y observó el rostro de su mejor amigo con bolsas bajo esos ojos miel que poseía y que estaba pálido.

—¿Qué te sucedió?— dijo Harry mientras se sentaba en la cama.

—No lo sé, sólo me desperté de golpe y corrí al baño. Tal vez era porque algo que comí me cayó mal.

—¿Tú también amaneciste así?— se sorprendió. ¿Qué estará pasando?

—Lo mismo te pregunto a ti— sonrió— ¿crees que sea lo que estamos pensando?

Una sonrisa se abría paso en el rostro de Harry. E instintivamente llevo una mano a su vientre, creciendo la ilusión en su corazón. La idea de un pequeño príncipe llegando y llenando el inmenso palacio de risas y alegría, le hizo pensar que debía salír de dudas.

—Necesitamos saber si es cierto— sentenció.

Así que agarró a Zayn, se cubrieron bien el rostro y salieron de la habitación, pasaron por la cocina saliendo por la puerta de servicio y fueron a comprar una prueba de embarazo para él y su amigo. 

Con el corazón latiendo a mil, con la esperanza de tener un bebé fruto del amor que Louis y él se tienen.

¿Será posible?