¿Sueño o pesadilla?

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Dipper abre los ojos lentamente, parpadea varias veces para que su vista se acostumbre poco a poco a la intensa blancura de las lámparas quirúrgicas que su tío requirió para lo que sea que le haya hecho, el mayor las apaga gradualmente para ayudarlo y finalmente se quedan con la media luz a la que están acostumbrados. Ford lo ve con una suave sonrisa en los labios, misma que de a poco se tensa al notar que el joven frente a él aún no parece volver del todo, comienza a ponerse nervioso pensando en que pudo surgir un fallo en sus cálculos.

-Dipper...¿Estas bien?...-cuestiona finalmente el científico, rompiendo la tensión en el ambiente y sin apartar la vista del castaño menor.

-...¿Este...es el mundo real?...tuve un sueño muy extraño...casi parecía que lo viviera pero...

Deja la frase a medias y comienza a ver todo a su alrededor, sintiendo como si el tiempo dormido hubieran sido mucho más que solo unas cuantas horas; reconoce el lugar poco a poco, familiarizándose de nuevo con todo hasta que esa sensación de extrañeza desaparece por completo y, como si de una ilusión se tratara, la actitud del chico vuelve a ser la misma alegre y entusiasta. 

-Supongo que aún no despertaba del todo, necesitaba un momento para recordar jeje

-Seguramente fue a causa de la anestesia, debo tener más cuidado en ello. Hace tiempo que no hago prácticas médicas, necesito repasar algunos apuntes y los archivos de la familia. -es lo único que se le ocurre y deja el asunto de lado.-...Mejor dime, ¿qué soñaste?

-Lo mismo que cuando estaba...emm...bueno...ya sabes...-intenta ser delicado, pues sabe cuanto lo quiere su familia y teme que el incidente aún lastime en cierta forma a su querido tío, pues aunque lo oculta muy bien, sabe que la culpa aún está rondando su mente y le traen recuerdos no solo de él sino de sus padres.-...bueno...el punto es que, desde que desperté no tuve sueños hasta ahora y...parecía que era la continuación, como una historia en mi mente. Estaba recorriendo un lugar extraño, para mi era parecido a un laberinto porque siempre me perdía, todo era formado por enormes túneles con luces de colores incrustadas a los costados, y había robots al rededor, pero no me hacían nada, más bien parecían mis amigos, me saludaban...tuve ese sueño varias veces mientras..."tomaba mi siesta larga", y el lugar era similar al exterior cuando al fin lo conocí...pero esta vez era...mejor, todo estaba en mejores condiciones, los robots lo estaban reparando, de nuevo me saludaban cuando me vieron y...luego llegué a una parte que antes no me agradó, bueno, ahora tampoco me agradó pero esta vez fue diferente. En mi sueño anterior me encontré con una sombra tétrica que me daba escalofríos, pero en esta ocasión, vi a un chico de mi...de mi edad...al principio pensé que esos sueños eran una proyección lógica de mi mente para manejar todo el mundo en el que vivimos pero ahora comienzo a creer que es como cualquiera, mis sueños son simples reflejos de deseos y esperanzas, claro que no podemos convivir con las máquinas, y claro que no puede haber alguien viviendo con ellas como si fueran cualquier mascota...

Levanta la vista al fin saliendo de sus propias memorias y análisis, solo para encontrar en su tío una expresión de miedo que raya en el terror, esta vez no solo a sus palabras puesto que también se encuentra unos pasos más lejos de su sobrino. El científico regula su respiración hasta que ésta y su pulso vuelven a la normalidad, y aún con los nervios a flor de piel logra hablar con voz firme recobrando, aparentemente, toda su compostura.

-Deberías olvidar eso Dipper, son solo sueños. Necesito tiempo para analizar bien tus estudios y llegar a una solución, mientras tanto, por favor permanece lejos de los aparatos...se que te puede ser difícil, ambos somos muy entusiastas en ello, pero inténtalo.

-...S-si...entiendo...

Nada más se habla después de eso, Stanford solo sale de la habitación y deja a su joven aprendiz completamente desconcertado. Es la primera vez que ve tal reacción en su tío, definitivamente hay algo mal y su naturaleza le dice que averigüe de que se trata, mas su parte lógica lo obliga a obedecer al mayor y solo se retira a su cuarto. 

Pasan las horas, Dipper no logra calmarse, la tensión que tienen los genios es palpable para todos y lo último que saben de ambos es que Ford se encierra en su laboratorio a continuar con sus labores y Dipper se queda en su habitación jugando con su colección de cubos rubik...al menos eso parece, pues su mente sigue hecha un desastre y no puede hacer nada por evitarlo.

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