- Jeon Jungkook, un alfa fuerte deseado por las Omega hembras.
- Kim Taehyung, chico tímido Omega. No le interesa ningún alfa.
Odia ser un Omega, peor aún cuando está en celo.
Taehyung logra de alguna u otra forma captar la atención del Alfa más de...
Namjoon paseó por cada esquina y lugar de aquel viejo y abandonado estacionamiento. Necesitaba encontrar a Seokjin, su miedo lo hundía y aquel pensamiento de perder a Seokjin también.
Entró a una especie de cuarto, pero lleno de cámaras. Revisó casa una de ellas, encontrándose con la ubicación de SeokJin, Jimin y TaeHyung. Los tres estaban atados en una silla, tenían una especie de cuerda en la boca. Los tres gritaban con desesperación.
— Llama a Jungkook, Hoseok y a YoonGi. Diles que ya los encontré. — Min-Hoo asintió y se comunicó de nuevo.
— Jungkook ya lo encontramos.
— ¿Ah Seokjin?
— También a Tae.
— Vamos para allá.
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— Tu los desatas y yo te cubro — Namjoon y Min-Hoo bajaron las escaleras topandose con el sótano y los tres chicos quienen suplicaban auxilio.
El castaño se acercó rápidamente y desató las cuerdas de los tres jóvenes.
—¡TaeHyung! — Jungkook llegó corriendo, y apenas vió al peliplateado se alegró. Fue corriendo hacia él. Pero, sonó una bala. TaeHyung se horrorizó al ver a Jungkook en el suelo desangrándose, mientras que YoonGi cubría y protegía a Jimin. Namjoon disparo al hombre de traje negro.
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El pitido del artefacto fue lo único que puedo distinguir en ese momento, su cabeza y pecho dolían como el infierno, pero no se quejaba. Abrió sus ojos de poco y observó el techo blanco pálido, bajo su mirada examinando la habitación. Sofás, una camilla, un armario lleno de documentos. Miró hacia un lado y vió a TaeHyung durmiendo, visualizo la ventana y supo que era de madrugada.
El mayor se removió en su sitio, despertó de a poco y soltó una quejido. El pelinegro cerró sus ojos rápidamente.
— Jungkook-ah, estuve aburrido todas las semanas. Extrañé tu sonrisa de buenos días, hace días que no veo tus ojos ¿podrías despertarte? — Ya olvidó la cuenta de cuantas veces pidió eso al menor. Pero nunca se hicieron realidad. El mayor se acercó y reposó su cabeza en el pecho del menor. Este sonrió por sentir la calidez que le proporcionaba el peliplateado, tenerlo de vuelta en sus brazos no sonaría nada mal.
— TaeHyung-ah, sigues siendo tierno — Hablo con voz ronca. El mayor se levantó de golpe y sonrió con dulzura.
— J-Jungkook..— Abrazó al menor. Mientras sollozaba levemente.
— No llores..— Acuno el rostro del contrario el sus palmas. — Yo..quería preguntarte algo.
— ¿Uhm?
— Debí habértelo dicho antes. Pero no tuve elección, ya que..Me pasó esto. — Suspiró decepcionado para sí mismo.— Yo..quisiera s-salir contigo, pero no c-como amigos.. Tú me entiendes ¿no? Osea, sabes a lo que me refiero con dec-
Fue interrumpido por un beso tierno de parte de TaeHyung.
