¿Secuestrada? - Gianluca Ginoble

Capítulo Nº28: "La Entrega"

#NARRA Atenna#

Sólo quiero irme...

Quiero perderme...

Quiero desaparecer...

Quiero que me trague la tierra...

No puedo creer todo lo que había escuchado.

Pero tenía razón.

Él si lo había echo.

Me sentía terrible, destrozada. Sentía mi corazón echo trizas. Sentía ira. Me sentía estúpida. Me sentía traicionada. Tenía tantas emociones encontradas. ¿Cómo es que le creo a Gianluca? Porque contó como había asesinado a mi madre con todo detalle, si, era cierto. La habitación hecha un desastre, mis padres atados y golpeados, los que habían dicho. Si, fue él.

Él asesinó a mi madre.

Estaba acostada en la cama, boca arriba, con las piernas y brazos estirados.

Duele...

Estaba mirando el techo, pensando. Pensando en que pensar primero.

Mi padre asesinó a mi madre.

Gianluca Ginoble, si, él había jalado del gatillo. Pero el autor intelectual de todo era mi padre, les había pagado para que le quitaran la vida.

No puedo creerlo...

La persona en la que más confiaba...

¿Por eso siempre me dio lo que deseaba? ¿Se habrá sentido culpable? ¿Verme sufrir desde ese día, yendo día tras día al psicólogo para superar esa parte de mi vida lo habrá hecho pensar? Pero la pregunta que más recorría mi mente:

¿Qué pasará ahora?

No lo sé. Después de que nos entreguen, no sé que pasará. ¿Se acabará todo esto de El Trío Italiano? ¿O sólo los dejarán libres y pasará como si nada? Lo dudo, pero ya no me interesa. En este momento lo que quiero es dormir, descansar. Estoy agotada y no comprendo el porque. Me volteé y cerré los ojos para dormir.

#NARRA Gianluca#

- Mirale el lado positivo. — Ánimo Ignazio.

- Juro, que no le veo nada positivo a toda esta situación. — Pasé las manos por mi cara. Estaba sentado en mi silla, bueno, sentado no sería la palabra ideal, practicamente estaba acostado.

- Atenna al final supo la verdad y Ernesto, Mariagrazia y Nina saldrán libres; ellos no tienen nada qur ver con esta situación. — Se encogió de hombros. — Además, ya no más destrucción. Lo que queda es que nos vamos a pudrir en la carcel el resto de años que nos quedan.

Esta bien, tiene razón.

-  Si, está bien que sepa la verdad. Pero te recuerdo que probablemente se siente una porquería, se acaba de enterar que su padre nos pagó para asesinar a su madre. Y sobre Ernesto, Mariagrazia y Nina, concuerdo. — Al menos ellos pueden seguir con su vida como si nada. — O posiblemente nos maten.