Escarlata[+18] ❀ᴛᴀᴇᴋᴏᴏᴋ Mpreg

08: Lealtad eterna

Llegaron al lugar de la misión finalmente, mirando el lugar desolado que había ante ellos. Aquel lugar olía a sangre, un fuerte aroma que hizo que JungKook se sintiera extraño. TaeHyung se giró a verle, haciendo que el menor le mirara curioso.

—Iré arriba, encárgate de los de abajo y alcánzame—Ordenaba el pelinegro tranquilo—Destruye a todos entonces.

—Sí, lo haré.

TaeHyung se desmaterializó, dejando a JungKook solo en aquel oscuro lugar. El chico castaño soltó un suspiro, mientras caminaba por el lugar con su arma lista. No duró ni un minuto cuando empezó a olisquear más fuerte la sangre, siguió el olor hasta una habitación oscura, donde un hombre bebía sangre de una mujer con hambruna.

JungKook no dudó en disparar, siguiendo su camino algo aburrido al no ver a nadie más de los que buscaban. Pero, escuchó en el piso de arriba varios disparos de arma, además de la risa de TaeHyung, al menos él estaba al parecer pasándolo de lujo.

JungKook avanzó hasta arriba, dispuesto a ayudar a TaeHyung. Entró de golpe a aquella planta y preparó su arma para disparar y ayudar al pelinegro.

—Son marionetas, no humanos—Se decía a sí mismo—...es como dispararle a calabazas. Solo apunto y disparo. Yo apunto, disparo y todo se acaba con eso.

Empezó a disparar con aquella perfecta puntería que le caracterizaba, mientras avanzaba por el lugar a paso veloz. Los disparos de su arma resonaban por el lugar, sin darse cuenta de la ausencia de su mayor. Entonces, absorto en su labor, no notó cuando su instinto vampiro empezó a surgir.

Sus ojos se tornaron escarlata, similares a los de TaeHyung. Sonrió mostrando los colmillos filosos que poseía, sonrió más mientras seguía disparando y avanzando. Era un escenario un tanto sádico aquel.

—Chico castaño, si vas a disparar como loco, asegúrate de darles en la cabeza o corazón—Escuchó la voz del pelinegro detrás de él—No es como si ellos fueran ya humanos para sentir dolor. Ni siquiera son vampiros como nosotros. Mátalos lo más rápido posible, es por su bien.

El menor acataba las ordenes, con una sonrisa sádica y mirando con aquellos ojos escarlata a TaeHyung. Quien solo sonrió ladino ante aquello.

—Sí, mi amo—Sonreía el menor mientras seguía con lo suyo.

—Parece que empezaste a comprender—Puntualizaba TaeHyung mirándolo desde sus gafas— Sobre nosotros y nuestro trabajo.

JungKook, quien estaba cubierto de sangre miraba sus manos de las cuales escurría aquel líquido vital. Sacó su lengua ansioso en probar aquella sangre, mientras TaeHyung sonreía ante aquella aceptación del castaño a beber sangre.

Pero de pronto el sonido de un arma ajena a ambos sonó, siendo una bala la que atravesara el pecho de TaeHyung y el de JungKook. El mayor lanzó a JungKook a un costado, mientras varias balas caían en él.

—TaeHyung...—Susurró con terror el castaño.

—Veo que ese chico es importante—Escucharon una voz saliendo de entre las sombras—Pero primero acabaré contigo bastardo. ¡Arruinaste mi ejército!

Balas atravesaban el cuerpo de TaeHyung, JungKook no pudo evitar quedarse en blanco. Recordando que esa escena la había presenciado cuando era humano. El cuerpo desgarrado del pelinegro cayó al piso, mientras el hombre miraba con burla el cuerpo y se giraba hacia JungKook.

JungKook desangrándose, tomó como pudo el cuerpo del pelinegro y huyó de allí como pudo hasta un corredor vacío. Se detuvo de golpe, dejando el cuerpo de TaeHyung reposar en ese lugar y mirar el rostro del pelinegro con tristeza.